La asociación Niño x Niño en conjunto con el Instituto Mexicano del Transporte, realizaron en abril el taller “Seguridad vial” a 486 niños, para la concientización del tránsito seguro.
De acuerdo con datos recientes del Instituto Nacimiento de Estadística y Geografía (Inegi), los accidentes viales son la primera causa de muerte en niños de 5 a 14 años.
Ante esto, María Teresa Padilla Lule, coordinadora Estatal de Prevención de Lesiones por Accidentes de la Cruz Roja Mexicana en Guanajuato, comentó durante el taller que es responsabilidad de los adultos proteger a los niños que viajen en un vehículo o transiten por las calles.
En lo que se refiere a viajar en los vehículos; deben utilizar un sistema de retención infantil, o mejor conocida como la sillita para coche. Debemos considerar la edad, talla y peso de la niña y el niño que la va a usar, es fácil saberlo, ya que todos los modelos de este sistema indican para qué edades corresponden”, dijo.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda que los niños entre cero y 12 años de edad no debe viajar sin estar asegurado al vehículo en la parte de los asientos de atrás; porque de esta manera se reducen lesiones en un lactante hasta el 70?% y en niños de un 54?% a un 80?%.
“Los niños merecen vialidades seguras. En algún momento del día todos nos convertimos en peatones, por lo tanto, debemos enseñarles cómo emplear los espacios para poder atravesar las calles, siempre por la esquina, sobre la señalética de cebra, respetar los semáforos peatonales y utilizar las ciclovías”, explicó Padilla Lule.
“La mejor forma de enseñarlos es a través del ejemplo, no hay aprendizaje más significativo para un niño que el ver a un adulto lo que hace.
Padilla Lule también informó que en los últimos años se han aumentado los accidentes en vehículo por el uso de las motocicletas.
Los niños al ser pasajeros de estos vehículos se vulnera su seguridad y se pone en riesgo su vida. Los menores al viajar en una motocicleta no utilizan ningún equipo de seguridad; si bien, en algunas ocasiones intentan ponerles un casco, este no es de su talla, ya que no existen cascos para niños porque ellos no deben viajar en este tipo de vehículos.
Podemos justificar que transportamos a nuestras niñas y niños por varias razones, pero ninguna es válida, nada justifica poner en riesgo la vida de una persona y sobre todo una que está a nuestro cargo y es nuestra responsabilidad”.
Por todo lo anterior, María Teresa Padilla Lule, coordinadora Estatal de Prevención de Lesiones por Accidentes de la Cruz Roja Mexicana en Guanajuato, invitó a la reflexión de lo que se hace por el trayecto seguro de los niños.
“Empecemos a ser más responsables de la seguridad vial, seamos ejemplo de nuestros niños y nuestras niñas”, finalizó.