¡Campeones! Manchester City por fin alza el título de la Champions League tras ganar la final ante Inter de Milán por marcador de 1-0.
El partido
Lo que parecía una final cómoda para el Manchester City, se convirtió en todo lo contrario con un férreo Inter de Milán que, durante todo el primer lapso, provocó imprecisión y nerviosismo en el equipo rival al presionar desde la primera línea.
Aunque recuperaban la pelota y ostentaban buenas transiciones en el medio sector, el último pase les fallaba dentro del área, sobre todo en los botines de Lautaro Martínez, quien no pudo sobresalir en los primeros 45 minutos a pesar de tener oportunidades para hacerlo.
La única de peligro para los ingleses corrió a cargo de Erling Halaand, el noruego de 22 años de edad quien aprovechó un pase al espacio de Gündogan y, ya dentro del área, sacó un izquierdazo en la misma zona del espacio grande cuando el cronómetro estaba en los 26 minutos.
Sin embargo, la figura de André Onana hizo acto de presencia con una senda concentración que provocó la atajada de dicha opción peligrosa al ataque.
Una vez iniciado el complemento, las cosas persistieron tal y como sucedieron en la primera mitad, pues los italianos no cesaron en la intensidad y presión desde la defensiva contraria.
No obstante, la figura Rodrigo Hernández se hizo presente a los 68 minutos con un golazo en la media luna que, en medio de un considerable mar de piernas de la defensa contraria, se incrustó al fondo de las redes para sentenciar la gran final.
Contrario a lo que se pensaba, el gol no significó tranquilidad sino todo lo contrario: el enorme dramatismo sobre la cancha del Estadio Olímpico Atatürk.
Tan sólo dos minutos después, Brozovic estrelló su cabezazo en el travesaño producto de una desconcentración defensiva de los ‘Citizens’.
Por si fuera poco, a tres minutos del final, Ederson se erigió como la figura del encuentro gracias a unos sorpresivos reflejos, pues detuvo un cabezazo de Romelu Lukaku en la línea de cal de su arco.
La gloria alcanzada
Así, con dramatismo puro incluso en la última jugada del encuentro, Pep Guardiola por fin puede levantar el título de Champions League después de tanto sufrimiento acumulado tras años de fracasos en este torneo internacional.
Como si no fuera bastante, los ingleses confirman su asistencia al Mundial de Clubes con un glorioso triplete junto a la Premier League y FA Cup.