CDMX.- Con Yordi Rosado, Christian Martinoli contó cuando en el Mundial Corea-Japón 2002, sufrió un ataque por estrés, el cual le ocasionó que se le trabara la lengua y contó que André Marín le dio varios golpes para que no se quedara dormido.
Previo al partido de la Selección Mexicana contra Italia, Martinoli sufrió un “martillazo en la cabeza” y recordó que cuando estaba en la Universidad, sufrió algo parecido por desvelarse.
Se me empezó a dormir la lengua y un brazo, y cuando se me empezó a dormir el otro brazo, yo ya tenía el antecedente de te voy a querer hablar y tú no me vas a entender”, contó.
Martinoli le dijo a ‘Tato’ Noriega y a Luis García lo que le sucedía, por lo que pidió un tranquilizante, y André Marín lo llevó en una camioneta.
Con el señor Nieto, el camarógrafo de André; Nieto me venía, él traía a Saint-Charbel y todos sus santos y me venía haciendo masajito; Marín me venía pegando, para que no me durmiera según él; me metía unos pin… cachetadas que yo quería decirle ‘Me estás matando’, pero no podía”, reveló.
Martinoli llegó al lugar donde estaba concentrada la Selección Mexicana y fue atendido por Radamés Gaxiola, quien lo recibió junto con Paco Gabriel de Anda.
“Me reciben en calidad de bulto, me cargan en el lobby, me guacareó, ahí me empiezo a sentir mejor; me llevan al cuarto de Gaxiola y me dice: ‘Te vas a tener que quedar unas tres horas’, me puso un tranquilizante y se me pasó el tema”, dijo.
El cronista de Azteca Deportes señaló que se esperó las tres horas para decidir si narraba el México vs Italia, pero aseguró que acudió al mundial de 2002, pensando en una “revancha personal”, ya que en Francia 98’ no le había ido bien.
Agarré coraje, no me sentía bien la verdad, pero dije yo narro; aparte es contra Italia”, declaró y agregó que un partido de ese calibre, ningún comentarista se lo quiere perder.
Christian Martinoli aceptó que cometió un error al narrar el gol de Jared Borgetti, ya que dijo que el delantero estaba siendo marcado por Nesta, cuando Paolo Maldini era quien lo cubría, pero lo hizo de forma inconsciente.
El cronista aceptó que reconoce lo hecho por André Marín, así como el apoyo que le dieron Paco Gabriel de Anda, Luis García y el doctor Gaxiola.