Una doble revisión le dio la bienvenida a los aficionados que presenciaron el Clásico Nacional.
Tratando de evitar de que se repitieran hechos violentos, se implementó un fuerte operativo policial, lo que retrasó en demasía el ingreso de los seguidores al Estadio Omnilife.
Desde media a una hora es lo que le inviertió un aficionado para poder ingresar a la casa de las Chivas, pues además del cerco policial implementado a los automovilistas, detectores de metal y una revisión exhaustiva es parte de lo que se vio en las afueras del coloso rojiblanco.
Los policías evitaron que los aficionados llegaran al estacionamiento del Omnilife con bebidas alcohólicas, objetos contundentes y con asadores con bases puntiagudas.
Largas filas en todas las entradas del Omnilife, aficionados siendo revisados y desesperados por la cercanía de la hora del juego, fue parte del panorama en los minutos previos al comienzo del duelo.
En contraparte a estos operativos, la barra americanista El Ritual del Kaoz informó en redes sociales su llegada a Guadalajara, para asistir a un Clásico en el que estarían prohibidas todas las barras.
La barra azulcrema, según su cuenta de Twitter, evitó el retén impuesto por la Autopista México-Guadalajara en el que participan los 3 niveles de la Policía: Federal, Estatal y Municipal.
“Nos complace comunicarles que todo nuestro contingente llegó con bien y ya estamos instalados. #SiemprePresentes”, publicó la barra en la cuenta @La48_OFICIAL.

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