Reñidos en la disputa de la liga española, Barcelona y Atlético de Madrid se citan también el martes por los cuartos de final de la Liga de Campeones, en duelo continental inédito así como de temibles pistoleros: el azulgrana Lionel Messi y el rojiblanco Diego Costa.
Entre ambos suman 69 dianas en la presente temporada, 36 Messi y 33 Costa, aunque ninguna de ellas ha llegado en sus tres cruces previos esta temporada, saldados con tres empates, un gol por bando y equilibrio de fuerzas, pese a que el Barsa se llevara la Supercopa de España a principios de curso por el valor doble de los tantos a domicilio.
Pero a diferencia de entonces, cuando apenas jugó 180 de los 270 minutos posibles, Messi alcanza la cita en aparente plenitud física, como se encargó de resaltar el lunes el técnico azulgrana Gerardo Martino. “La gran diferencia respecto a los cruces previos es el momento en que llegamos y que tenemos a Messi desde el inicio”, opinó el rosarino.
Costa es el hombre del momento en el Atlético que dirige el también argentino Diego Simeone, inesperado líder del campeonato cuando restan siete fechas para la conclusión, y que sueña con levantar su primera copa de Europa, pues en sus vitrinas apenas luce dos trofeos de la Liga Europa y ninguno de la máxima competición continental, por cuatro del rival catalán.
“Ellos juegan a partir de la pelota y nosotros, de los espacios. Este será el cruce más complicado porque ellos no estaban entonces como ahora. Lo seguro es que habrá un entrenador argentino en la semifinal”, se congratuló Simeone, quien resaltó el gran estado de forma de los goleadores. “Costa es tan trascendente para el Atlético como Messi para el Barsa. Los dos están en grandísimo momento, Diego creciendo cada día y Messi demostrando que los meses que descansó le vinieron bien y llegará en gran forma por el Mundial, que es lo que de verdad interesa”, bromeó.
El Barsa no quiere faltar a su cita con las semifinales, que ha disputado siete años consecutivamente, y una eliminación a manos del cuadro colchonero supondría una decepción mayúscula para la entidad y el debutante Martino.
El timonel vuelve a respirar en la competición doméstica, donde el equipo viene de enlazar cuatro victorias consecutivas, una de ellas ante el acérrimo rival Real Madrid, para reengancharse al segundo lugar con un punto de desventaja respecto al Atlético, al que se enfrentará de nuevo por la última fecha.
Pero ahora toca un cruce de Champions previsiblemente equilibrado y apasionante que inicia en feudo azulgrana, donde los locales solo han perdido un cotejo europeo de los últimos 26 disputados. Esa derrota, por 3-0 ante el vigente campeón Bayern de Munich en las pasadas semifinales, fue traumática y anunció el final de un ciclo exitoso que Martino, cuestionado en su primera campaña al timón, intenta prolongar.
Su mejor aliado ante tamaño reto sigue siendo Messi, quien suma ocho dianas en sus últimos cuatro partidos y ocho en total en la Champions, por detrás de las 13 del madridista Cristiano Ronaldo.
Escarmentado por la lesiones que mermaron su rendimiento en 2013 y consciente de que el Mundial de Brasil también espera en el horizonte, Messi ha exhibido una versión menos explosiva en 2014, más cerebral y quizás también más eficaz, donde el peso en el juego del equipo va mucho más allá de su faceta goleadora.
El rosarino, quien ostenta 20 tantos en 19 partidos contra el Atlético, incluidos tres tripletes, viene de dar un recital en el clásico contra el Madrid y convirtió su cuarto penal en cuatro cotejos en el peleado derbi del sábado contra el Espanyol, equipo al que Martino comparó por estilo al rocoso Atlético, cuya última semifinal data de 1974.
“Preveo un partido abierto y friccionado ante un Atlético fuerte y confiado. Intentaremos no encajar goles, pero hay que igualar su intensidad y ganar para trasladar la presión al rival”, declaró Martino.
Eliminado de la Copa del Rey por el vecino Madrid, el cuadro de Simeone afronta con ilusión máxima el cruce de Champions, donde comparte invicto únicamente con el vecino merengue, y se siente alentado de cara a la vuelta por su fortaleza en el estadio Vicente Calderón, pues es el único equipo sin derrota local en la liga.
Como Messi en Barcelona, Costa tira del carro colchonero y viene de firmar otra portentosa actuación en la victoria visitante sobre el Athletic de Bilbao. El oriundo de Brasil nacionalizado español cuenta 25 goles en la liga por 23 de “La Pulga”, más otros siete en Champions.
“Diego juega con una ilusión tremenda en cada jugada, eso no cambia. Intentaremos lograr ese gol fuera de casa que te da un plus en la Champions. Hemos jugados dos finales (copa y Liga Europa) en los dos últimos años y tenemos confianza”, expresó el volante rojiblanco Tiago, previsible titular de un once en que no estará por sanción Raúl García.
El arco blaugrana echará de menos a Víctor Valdés, inactivo por varios meses tras romperse los ligamentos de la rodilla derecha. En su lugar estará José Manuel Pinto, quien no ofrece las mismas garantías.
“Tenemos que ganar aquí porque la eliminatoria se decidirá en el próximo partido. Costa está en gran momento, pero el partido va mucho más allá. El Atlético tiene jugadores de mucha calidad y es un rival muy incómodo. No firmo el empate, juego para ganar”, arengó el lateral Dani Alves.
El arquero Thibaut Courtois, el menos goleado de la liga con solo 22 tantos encajados en 31 fechas, es la otra gran baza rojiblanca, mientras que el Barsa espera el despertar del brasileño Neymar, autor del tanto que le valió la Supercopa, en el tramo decisivo de la temporada.