Ciudada de México.- Integrantes del 27 Batallón de Infantería en Iguala recibían un pago mensual de hasta 50 mil pesos del grupo criminal Guerreros Unidos a cambio de facilitar la operación de la banda, según el testimonio de un testigo protegido.
En el marco de la investigación del asesinato de los 43 normalistas de Ayotzinapa, el testigo protegido “Carla” reveló el pasado 13 de abril ante la FGR que miembros del Batallón vendieron armas a la organización criminal, quienes a su vez las prestaban a un grupo de la Policía de Iguala conocido como “Los Bélicos”, al que se atribuye haber entregado los normalistas a los narcos que los desaparecieron.
Al abundar sobre los supuestos sobornos que entregaban a los militares, previo al caso de los 43, “Carla” afirmó que Guerreros Unidos tenía en su nómina a alrededor de 20 militares del 27 Batallón.