León, Guanajuato.- “El reto más grande es seguir vivas, el día de hoy salimos sin seguridad, soy honesta, sí nos da un poquito de miedo”, afirmó Karla Martínez, coordinadora de la Brigada de Búsqueda de Hasta Encontrarte. 

Expresó que además temen por la seguridad de un niño que les acompaña en las búsquedas, para tratar de encontrar a sus tíos desaparecidos; no pueden negarle que las acompañe, dijo, pues tiene derecho a buscar a sus seres queridos. 

“Para mí es mucho riesgo y mucha responsabilidad de traerlo, pero me da mucho gusto que él quiera ser partícipe en esto, que vea y a él le guste el trabajo que está haciendo la brigada”, añadió. 

Karla Martínez afirmó que la Brigada de Búsqueda nació por la manera “incorrecta” de trabajar de la Comisión Estatal de Búsqueda, pues consideran que para buscar a sus familiares no debe existir un horario.

Comentó que las mamás, hijas y hermanas de desaparecidos se han organizado para que cada una de ellas tenga una tarea específica. Por ejemplo, ella y una compañera son las que siempre entran a las fosas a recuperar los cuerpos y otra está asignada para destaparlos, para poder tomar la evidencia y con ello puedan localizarlos fácilmente; otra integrante de la brigada se encarga de tomar fotografías a los cuerpos. 

“El resto de las compañeras están al lado para poder apoyar en las tareas de excavación, retirar o traer herramientas”, dijo.

Asimismo hay quienes se hacen cargo de alimentar redes sociales, como TikTok, donde comparten videos de su labor, o difunden las fichas de búsqueda en las páginas de Facebook.

“Yo de manera personal recibo los puntos (de búsqueda), ya ahorita actualmente en mi perfil personal (de Facebook) y es como se empieza a coordinar una búsqueda”, dijo. 

Definen puntos de búsqueda 

Para saber dónde buscarán, dijo, estudian el mapa del municipio, revisan cuáles son los puntos más cercanos entre los reportados, sus características geográficas, detalles topográficos y otros detalles específicos.

“Por ejemplo, el día de hoy mapeamos puntos aquí en Irapuato, Guanajuato, teníamos cuatro puntos para acudir el día de hoy, se empieza primero con uno, si se llega a descartar seguimos con el siguiente”, agregó.

Expresó que hay días que tienen puntos positivos, es decir, donde encuentran víctimas, y después de hacer todo el trabajo que implica, desde la localización hasta la extracción de la fosa, revisan los tiempos y ven si es posible trasladarse a otro lugar a una nueva búsqueda.

Después de documentar el hallazgo y tomar fotografías de los restos, avisan a la Fiscalía General del Estado.

Fracasa el Estado 

Karla Martínez informó que la brigada tiene año y medio trabajando y en ese tiempo ha hecho 413 búsquedas en campo con 141 hallazgos de restos humanos, y 12 hallazgos de niños, mujeres y hombres en vida. 

“No podemos tomar fracasos como parte de la brigada, para mí el hecho de que estas madres, estas hijas estén en pie, para mí es una victoria, todos los días sabemos todo lo que nosotros sentimos por dentro, el simple hecho de salir y tener estas ganas de trabajar, de ayudar, de escarbar, ya para mí es una victoria”, indicó. 

Y, contundente, dijo que el fracaso es para el Estado, que es el que debería hacer las búsquedas, y no haberlas obligado a salir a buscar a sus familiares. 

Encuentra sin vida a su hermana

Luz Gabriela Rodríguez Mendoza se unió a la brigada para localizar a su hermana, Ana Fernanda Rodríguez Ramírez, desaparecida el 8 de noviembre del 2022.

La joven fue hallada muerta el 25 de diciembre y por falta de pruebas genéticas su cuerpo se lo entregaron hasta el 26 de mayo pasado.

¿Cómo desapareció su hermana?

“La encontraron en Loma de los Conejos, no toda completa, le faltaba la cabeza y un brazo, ahorita estoy en espera de que me entreguen el cráneo, porque ya lo encontraron.

“Yo pregunté por qué se la habían llevado, qué hizo o qué debía? (dijeron) ‘la verdad ella no hizo nada’.

¿Qué sintió al saberla sin vida?

“Fue una noticia, triste, dolorosa, porque era la más chica, yo siempre desde chiquita le cambiaba su pañal, le daba su mamila, era como mi hija y éramos muy unidas, diario me mandaba mensajes ella y ahorita ni un mensaje ni nada, es muy doloroso”. 

‘Hay días en los que no queremos despertar’

Karla Martínez busca a su hermano Juan Valentín Martínez Jiménez, quien el 18 de febrero de 2020  fue sacado a la fuerza de su casa a las 4 de la mañana. Ella interpuso una denuncia por la desaparición del joven, pero nada pasó, así que salió en su motocicleta a buscarlo por los rincones de Irapuato.

“Desafortunadamente por el contexto yo ya no lo buscaba en vida, por como se lo llevaron, yo creo que no se lo llevaron para platicar con él y conociendo el contexto y dándome cuenta cómo son localizados todos los desaparecidos o la mayoría de desaparecidos, es que yo empiezo a buscarlo de esta manera en fosas”, dijo Karla, quien se ha convertido en la líder de la brigada de búsqueda del colectivo Hasta Encontrarte. 

¿Ha pensado en rendirse? 

“Jamás, jamás, y voy a ser muy honesta, hay días que nos han puesto muchas trabas y nos baja mucho el ánimo, creo que es muy normal la situación de una persona con una desaparición, con una ausencia, es bastante vulnerable. Hay días en los que no queremos despertar, hay días en los que no podemos dormir, pero aun así todos los días me encomiendo a Dios, le pido fuerza a mi hermano para que me acompañe, para que me cuide”. 

¿De dónde saca fuerzas, tanto para usted como para sus compañeras?

“Yo creo que justamente cuando les pido hacer esta brigada y les pido a ellas que no se rindan es muy importante poner la muestra de lo que se tiene que hacer, entonces creo que yo no puedo doblarme, no puedo rendirme porque tengo un grupo de personas, de mujeres que confían en mí y me lo han dicho, ellas confían cada día en las decisiones que yo tomo, saben perfectamente que las decisiones que yo tomo son para cuidarlas”.

Con 12 años, sale con su mamá en búsqueda de sus dos tíos

Liliana Téllez Valdivia tiene dos hermanos desaparecidos y hoy es parte de la brigada de Hasta Encontrarte. Acompañada por su hijo de 12 años, busca a sus hermanos Hugo Diego Téllez Valdivia y Héctor Miguel Téllez González. 

Hugo desapareció el 13 de enero del 2018 en el fraccionamiento El Naranjal, era tatuador y barbero y tenía 33 años. Héctor Miguel era trabajador de la empresas Izzy, con 30 años desapareció en Salamanca el 30 de abril del 2023.

Randy, el hijo de Liliana, le acompaña en las búsquedas para encontrar a sus tíos.

“Me acompaña mi hijo, tengo cuatro hijos, pero tres son los que me han acompañado, uno tiene 17 y me acompañaba cuando tenía 15, Randy es el que más me acompaña, cumplirá 13 este mes, pero desde la edad como de 9 años él me acompaña a las búsquedas. 

¿Cómo se integró el niño a las búsquedas?

“De principio no me lo quería traer, pero me lo traje una vez y a él le gusta ayudar a buscar también, porque él dice que le da tristeza ver cuando nos salimos a búsqueda. 

“Yo me siento más segura cuando me lo traigo, cuando he venido sola no me siento a gusto, como que siento que me falta él”. 

Cuando encuentran una fosa ¿ha pensado que posiblemente ahí está su familiar?

“No lo quiero encontrar en una fosa, yo tengo la esperanza de encontrarlo con vida, aunque cinco años y siete meses es mucho tiempo, tengo fe y esperanza de encontrarlo con vida”. 

¿Hay temor de salir a las búsquedas?

“Sí me da un poco de miedo, pero yo creo que como siempre lo hemos gritado y lo han dicho mis compañeras, ‘nos han quitado tanto que nos han quitado el miedo’…  me da miedo que algún día nos vaya a pasar, pero Dios siempre está con nosotros”. 

‘Existe el temor de que nos asesinen’

Cuando desapareció su papá, Érika Rayas trabajaba en una panadería, pero dejó la ciudad por miedo. Sin embargo, no encontraba la paz y regresó a Irapuato, donde se unió al colectivo y a la brigada para hacer búsquedas de campo.

Érika busca a su papá, Rodrigo Rayas González, desaparecido desde el 12 de junio de 2020.

¿De dónde saca fuerzas para seguir con la búsqueda?

“Primeramente de mi mamá, de mi familia, y segundo de mis compañeras, nos damos el apoyo, nos damos la fuerza, cuando sentimos que ya no podemos entre nosotras agarramos fuerza”.

¿Ha pensado en rendirse?

“Jamás, está en pie la promesa que hice a mi familia y a mi papá, que yo lo iba a encontrar”. 

“Hasta que Dios me permita seguir en esto yo voy a seguir, aunque yo encuentre a mi familiar, Dios quiera que sí, yo voy a seguir con mis compañeras, no las voy a dejar, porque a mí me gusta esto, hacer esto, buscar a los desaparecidos, cosa que el Gobierno no hace”. 

¿Existe temor ?

“Existe el temor por la problemática de la seguridad que nos están condicionando, creo que la gente sabe cómo trabajamos nosotros, han visto los resultados, hemos dado mejores resultados que otras dependencias y, claro, existe el temor de que nos asesinen, no trabajamos con tanta seguridad”.

‘Nunca imaginé sacar cuerpos…’

Diana Hernández Sánchez es ama de casa, se unió al colectivo Hasta Encontrarte luego de que su hermano, Jorge, desapareciera el  24 de septiembre de 2020. Un mes después su cuerpo fue localizado en bolsas, en el municipio de León, y fue entregado a la familia en enero de 2021. Jorge era papá de tres niños y trabajaba lavando tráileres en una pensión.

“Para mí todo esto era muy, no sé, como de película, yo nunca me imaginé estar en esto, en el colectivo, en sacar cuerpos, en encontrar… nunca me pasó por la mente, hubo un cambio total, te cambia la vida completamente”, dijo sobre pertenecer a Hasta Encontrarte. 

La labor de Diana es “ayudar a Karla (Martínez) a liberarlos (los cadáveres de las víctimas), sacarlos y regresarlos a casa”. 

¿Qué siente al sacar un cuerpo? 

“Son muchos sentimientos, vuelves a recordar que así estuvo tu hermano, lo que él sufrió, pasó, entonces son muchos sentimientos, todavía estoy temblando, se te revuelve todo”.

¿De dónde saca fortaleza? ¿Tiene miedo?

“Sí, porque no tenemos seguridad, pues sí vienen los sentimientos de que algo nos pueda pasar… sí está riesgoso y sí te da miedo, pero viene uno con esa motivación de encontrar y saber que vas a regresar a casa a alguien.” 

Cumple promesa en memoria de su hijo

Antes de estar en la brigada, la mamá de Antonio Hernández Santos era comerciante. Dejó de trabajar, de vender ropa, para salir en búsqueda de su hijo. El joven desapareció el 5 de enero de 2022 y la brigada lo localizó sin vida el 5 de abril de ese mismo año, cuando ella acababa de unirse al colectivo. El cuerpo la Fiscalía se lo entregó el 22 de mayo del 2023. 

“Estuvo un año dos meses ahí (en el Semefo), yo iba a todas las galerías y nunca vi nada de prendas, ni nada, y sí había prendas ahí.

“En las fotos que ahora vi en la carpeta de homicidios, ahí están las prendas de él, desde bóxer, todo se nota y todas esas fotos  nunca las vi en galería, yo cada que me daban cita a galería iba, nunca falté, siempre acudí con la esperanza de encontrarlo… hasta que me hablaron.

“Mi hijo ya estaba ahí, y tenía más de un año, me lo volvieron a desaparecer”, dijo sobre la tardanza de la entrega del cuerpo de su hijo.

¿De dónde saca ánimos para seguir en la brigada?

“Es  muy desesperante no saber de un familiar, es una agonía diario, diario, eso nos quita el modo de vivir, yo jamás, nunca en la vida se imagina uno estar en estas condiciones de salir a buscar a alguien y es muy desgastante física y mentalmente, porque es una desesperación tener un familiar desaparecido, entonces me reflejo en ellas que siguen buscando.

“También es una promesa que le hice a mi hijo, cuando yo lo encontré le dije que por él, por su memoria y por todos los iba a seguir buscando”.