Con una brillante y blanquecina sonrisa en su rostro, Jesús Manuel Corona regresó al club que construyó los cimientos de su carrera profesional hace 15 años con su incursión en la Tercera División Profesional: los Rayados del Monterrey.
Mejor conocido en el ámbito futbolístico como ‘Tecatito’, su partida del balompié azteca a los 20 años de edad se dio en medio de un contexto burdo y polémico, pues detrás de la transparencia en el mercado de transferencias, estaba en pleno auge el llamado ‘Pacto de Caballeros’.
Una década después es recibido con aplausos y eufóricos gritos de entusiasmo a su alrededor, cuando en medio de un fuerte interés en Países Bajos, fue vendido por la directiva años atrás más por obligación que por convicción.
El rápido ascender del ‘Tecatito’
El sábado 7 de agosto del 2010, los Rayados de Víctor Manuel Vucetich visitaron la cancha del Andrés Quintana Roo para enfrentar a los Potros del Atlante.
Los regiomontanos, quienes venían de empatar por la mínima en San Luis y triunfar en casa ante los Estudiantes Tecos, disputaron la Jornada 3 del torneo Apertura con un nuevo nombre en la lista: Jesús Manuel Corona.
Tras cinco goles en 37 partidos con las fuerzas básicas de la institución, jugó 60 minutos como titular en la victoria de su equipo por 2-1 en el sureste de la República Mexicana.
A partir de ese momento, ‘Tecatito’ comenzó a ser visoreado constantemente aún y cuando fue relegado del primer equipo en el Clausura 2011.
Un golazo ante Estudiantes Tecos en el segundo semestre del 2011 marcó el convencimiento total del ‘Rey Midas’ que, sin ceder al inicio del siguiente año, lo ascendió a la máxima categoría para el Apertura 2012 con el Mundial de Clubes en la mira.
Con desequilibrio en sus botines, comenzó a dar muestras de su calidad en distintas jornadas del campeonato doméstico al sumar 543 minutos jugados en 11 oportunidades.
El Mundial de Clubes: El dulce despegue profesional
Integrado en el plantel que viajó a Japón para disputar el Mundial de Clubes, Corona sobresalió entre los demás con una sólida actuación como extremo izquierdo.
Con dos goles ante el Ulsan Hyundai y Al Ahly, su accionar en la derrota en semifinales ante Chelsea lo hicieron acreedor de los reflectores bajo sus hombros.
Constantes regates y precisos centros que no pudieron conectar sus compañeros, pusieron en el radar al sonorense que, de forma categórica, le ganó múltiples duelos al español Cesar Azpilicueta.
Con el tercer lugar en lo colectivo, el atacante mexicano ganó mucho más en lo individual: el interés del Twente de la Eredivisie.
Su complicada salida
Con menos de 40 partidos en la Liga MX, el interés creció más allá de los Países Bajos al hablarse del Hellas Verona de la Serie A y del histórico FC Barcelona.
Los planes para él estaban claros: emigrar a Europa para cumplir el sueño de toda su vida, pero aquello no se concretaría como él hubiese deseado.
‘Tecatito’ fue castigado por la directiva regiomontana al presentarse tarde a la pretemporada del equipo antes del Apertura 2013.
Con un gol en nueve partidos y 142 minutos de juego durante la fase final del Clausura 2013, su actividad bajó de forma considerable al torneo siguiente por su citado retraso a la pretemporada y casi dos meses de incertidumbre por las negociaciones.
No fue sino hasta el 26 de agosto del 2013 cuando, a pesar de haber regresado a la Sub 20 de la institución como castigo, el Twente terminó pagando una cláusula de rescisión que rondó los cinco millones de dólares por la participación del mexicano en el Mundial de Turquía Sub 20.
“Necesita un proceso para acabar de crecer, de madurar, nosotros no estamos en la intención de ofrecerlo, al contrario, creemos que debe terminar ese proceso”, declaró Luis Miguel Salvador tras vender al jugador.
Y es que Rayados se opuso en todo momento ante la transferencia del artillero nacional cuando el ‘Pacto de Caballeros’ estaba en pleno auge y, seguramente, era la oportunidad perfecta para ejecutarlo con el jugador.
El regreso 10 años después
Luego de una sinuosa salida, 49 goles y 78 asistencias en 371 partidos oficiales en Europa con el Twente, Porto y Sevilla, hablan de la grata década que vivió Jesús Manuel Corona fuera del balompié azteca.
Más allá del escándalo provocado por la misma directiva regiomontana al castigarlo en las fuerzas básicas con casi dos meses de inactividad, buscará aumentar sus cifras de siete goles y seis asistencias en 54 cotejos en México con los Rayados de Fernando Ortíz, quienes están obligados a ganar el título de liga.