Cabo Cañaveral, Florida.- La nave espacial Psyche de la NASA despegó ayer en una misión de seis años hacia un raro asteroide cubierto de metal.
La mayoría de los asteroides tienden a ser rocosos o helados, y esta es la primera exploración de uno metálico. Los científicos creen que pueden ser los restos del núcleo de un planeta primitivo y podrían arrojar luz sobre los centros inaccesibles de la Tierra y otros planetas rocosos.
SpaceX lanzó la nave espacial a media mañana desde el Centro Espacial Kennedy de la NASA. Se prevé que Psyche, que lleva el nombre del asteroide al que pretende explorar, alcance el enorme objeto con forma de patata en 2029.
“Es tan emocionante”, dijo Laurie Leshin, directora del Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA. Y Jim Bell, miembro del equipo Psyche, añadió que “hasta ahora ha sido un gran paseo”.
Una hora después, la nave espacial se desacopló del tramo superior del cohete y se alejó, lo que provocó aplausos de los controladores en Tierra.
Después de décadas de visitar cuerpos lejanos de roca, hielo y gas, la NASA está ansiosa por buscar uno recubierto de metal. De los nueve asteroides ricos en metales descubiertos hasta ahora, Psyche es el más grande y orbita alrededor del Sol en la parte exterior del cinturón de asteroides principal entre Marte y Júpiter, junto con millones de otras rocas espaciales. Fue descubierto en 1852 y lleva el nombre de la cautivadora diosa del alma de la mitología griega.
“Desde hace mucho los seres humanos sueñan con viajar al núcleo metálico de nuestra Tierra. Pregúntenle, si no, a Julio Verne”, dijo la científica jefe de la misión, Lindy Elkins-Tanton, de la Universidad Estatal de Arizona, antes del lanzamiento.
“La presión es demasiado alta. La temperatura es demasiado alta. La tecnología es imposible”, prosiguió. “Pero hay una manera en nuestro sistema solar de mirar un núcleo metálico, y esa es viajando a este asteroide”.
Los astrónomos saben a partir de observaciones con radar y de otro tipo que es un asteroide grande, de 232 kilómetros (144 millas) en su eje más ancho y 280 kilómetros (173 millas) en el más largo. Creen que hay hierro, níquel y otros metales, y posiblemente silicatos, con una superficie gris mate, probablemente cubierta de finos granos metálicos que son restos de impactos cósmicos.
Aparte de eso, es una mota de luz en el cielo nocturno, un objeto misterioso que dejará de serlo cuando llegue la nave espacial luego de una travesía de 3.600 millones de kilómetros (2.000 millones de millas).
Gsz