Difícilmente encontrarán, estimados amigos, a alguien más suato que el que no quiere entender.
Corrimos riesgo hoy de una hernia inguinal de tanta risa que nos provocó la ocurrencia del “líder” de la bancada morenista en la Cámara de Diputados, Nachito Mier, al acusar a la presidenta de la SCJN, Norma Piña, de “usar” a los trabajadores del Poder Legislativo, quienes ayer MANIFESTARON en contra de ser privados de sus pensiones, apoyos para la salud y otras prestaciones, lo cual sucederá si se aprueba la iniciativa lambiscona precisamente presentada por Mier para desaparecer 13 fideicomisos destinados a los trabajadores. Ello con el fin cantado y operado por el Tlatoani de Macuspana para “castigar” a la SCJN por fallar en contra de sus INCONSTITUCIONALES ocurrencias.
Los líderes del sindicato de la SCJN afirmaron lo siguiente: “Esto (lo que pretende Mier como amanuense del Emperador Lopezuma) es un grave atentado contra los derechos laborales de la base trabajadora. Al menos SEIS Fideicomisos (que Mier y su jefazo pretenden extinguir) están relacionados con obligaciones patronales, cuyo cumplimiento conforman los derechos de los y las trabajadores del Poder Judicial, tanto laboral, como de seguridad social, pensión, vivienda, cobertura de salud y retiro”.
¡Más claro ni el agua de manantial: y si no entienden es porque no quieren!
Al pretender socavar al Poder Judicial -de manera inconstitucional, debe enfatizarse-, Mier y su patrón-patrón están expropiando el fondo de retiro y las prestaciones de los TRABAJADORES del Poder Judicial. ¡Se los están diciendo los propios representantes de los empleados de OTRO PODER que -además- es INDEPENDIENTE y no puede ser sometido o tocado por el Poder Legislativo, y menos cuando éste está al servicio incondicional y SERVIL del Poder Ejecutivo!
Realmente la acusación que lanza contra la presidenta de la SCJN, Norma Piña, este señor Nachito Mier da risa. ¡Es absurda y patentemente falsa!, pretende encubrir el tremendo gazapo que él y su jefazo cometen en su intento por debilitar al Poder Judicial.
Entre otras cosas, no reparan ambos en el hecho de que si la SCJN les ha dado PALO en muchas de sus pretendidas alteraciones a nuestras leyes y reglamentos, o en las disposiciones que han querido tomar, esto ha sido porque SON ILEGALES o porque los “genios” que laboran para ellos en la FGR NO SABEN litigar correctamente sus demandas. Es decir, el enojo del Tlatoani irascible está mal dirigido, pues a quien debe quitarle presupuesto y extinguirle fideicomisos es a su FGR, organismo que ha sido politizado hasta convertirlo en algo inútil.
¿O de qué otra manera explicar que las órdenes de APREHENSIÓN, por ejemplo, contra los más peligrosos CAPOS del narco en México las ha formulado Estados Unidos y nuestra FGR no formula denuncias ni órdenes de arresto? ¿Y qué ha logrado, por ejemplo, la FGR para aclarar y presentar denuncias que resuelvan el caso que dice dirigir el propio Presidente, sobre el asesinato de los 43 normalistas del Ayotzinapa?
Entonces, ¿a quién persigue nuestra FGR? A los adversarios del Tlatoani, como el ex candidato presidencial Ricardo Anaya, a Elena Chávez, autora del libro “El Rey del Cash” (vía la Fiscal de la CDMX, Tina Godoy, a quien pretenden ratificar), a la propia candidata del Frente, Xóchitl Gálvez, a quien le intentan quitar su casa y amenazan a su hija, al ex Presidente Chente Fox, a quien le cerraron sus tienditas de “chochos”, al ex Presidente Calderón, a quien lo mandaron a vivir a España agarrándose del petate del muerto de García Luna, y así, etcétera.
Pero los “malos”, los verdaderos malos, esos gozan de plena inmunidad por parte de nuestra FGR, que si llega a actuar lo hará sólo por la presión del Gobierno de los Estados Unidos, que quiere -y así lo ha dicho claramente- la cabeza de los líderes de los cárteles que fabrican y mandan el veneno llamado fentanilo de aquí para allá.
Obvio, muy obvio, el doble discurso, el embuste, el rollo, y -sobre todo- una constante de la 4T: con ellos los patos les tiran a las escopetas y el despojo que pretenden consumar del dinero de los empleados del PJ quieren hacer creer que es culpa de Norma Piña, ¡y no de ellos, los despojadores!