Ciudad de México.- La megafarmacia, la última propuesta de la 4T para solucionar el desabasto de medicinas en México, luego de reformar el sistema de compras y distribución de fármacos e insumos de salud costará 3 mil 449 millones de pesos.
Se trata de un almacén gigante, donde según dijo en agosto pasado el Presidente Andrés Manuel López Obrador habrían “todas las medicinas del mundo en cantidades razonables” el cual será instalado en un terreno de 42 hectáreas en el municipio de Huehuetoca, en el Estado de México.
En dicho terreno se usarán dos naves industriales con superficie de 94 mil 127 metros cuadrados, que tendrán 90 mil posiciones de almacenamiento y podrán manejar 1.5 millones de piezas diarias.
El nombre oficial del almacén será Centro Federal de Almacenamiento y Distribución de Insumos para la Salud (Cefedis).
“El Cefedis permitirá concentrar los servicios de almacenamiento y preparación de pedidos (picking) que presta Birmex al ISSSTE, IMSS e IMSS-Bienestar, logrando economías de escala que permitirán mayor eficiencia y una reducción de costos para la institución”, afirmó la paraestatal Birmex en la evaluación socioeconómica del proyecto enviado esta semana a la Secretaría de Hacienda.
Agregó que los costos de almacenamiento son elevados porque las instalaciones están geográficamente dispersas, y el Cefedis permitirá contar con un stock permanente que mejore la planificación de compras, el control real de existencias y una mejor logística.
Actualmente, Birmex opera cinco almacenes que pueden manejar 1.2 millones de piezas diarias, pero la demanda de IMSS, IMSS-Bienestar e ISSSTE es de 4.3 millones de piezas.
Los principales costos del proyecto serán la compra de los terrenos, valuados en mil 400 millones de pesos, 390 millones de pesos para rehabilitar y adecuar las naves industriales, y 850 millones de pesos para equipos, cámaras frías, líneas de picking y una unidad robot, entre otros.
Además del costo de echar a andar el almacén, se estiman gastos anuales de operación y mantenimiento de unos 352 millones de pesos durante treinta años de vida útil.
El actual Gobierno separó los procesos de compras consolidadas de los de almacenamiento y distribución, y ha enfrentado problemas constantes de desabasto.
HLL