¡Somos latinos! Bandakadabra: una ronda por las dos plazas de León

Los primeros trompetazos de Bandakadabra rompieron la calma relativa de la tarde en la plaza de la fuente de Los Leones. Sin anuncio, sin llamadas y pasando las 6:10 de la tarde, la banda italiana entró en escena en otro capítulo del Festival Internacional de Arte Contemporáneo de León (FIAC). 

Sax, trombón, bombo, platillos, tarola, trompetas y una tarola, hicieron vibrar las plazas contiguas, inusuales en ciudades con herencia española, de León. 

Iniciaron con un par de canciones, cantadas con un megáfono y para atraer a la gente. Una mezcla de jazz y que luego transita por el swing, blues, drum n’bass y de pronto algunos bajos que llevaban a bits de un electro house. Una, como dice su página, “pocket orchestra” que nos hizo caminar, bailar, saltar y olvidarse de todo por poco más de una hora. 

Con el carisma grande como la tuba o el músico que toca la tuba, estos 7 italianos invitaron al grupo a seguirlos, y pasar por la Presidencia hasta a un costado del quiosco del jardín principal. No pararon de tocar nunca, ni de animar ni gritar. Nadie dejó tampoco de bailar. 

La banda es una banda de calle, de callejones, de paredes grafiteadas, de barrios. Raros se verían arriba de un escenario alejado del contacto con su público. 

Al irlos persiguiendo dan ganas de verlos en el Coecillo, San Juan de Dios, o en San Juan Bosco, en mercados, o en barrios de Nápoles, al calor de la tarde y con algo para refrescarse. 

“Cuando digamos ciao y les demos la espalda, ustedes gritan ‘¡otra, otra!’”, dice uno de ellos en un español italianizado. Primero habló en inglés y alguien del público pidió cambiar a italiano, “¡somos latinos!”, gritó uno de la banda. 

En pocos metros de música, un buen número de personas se reunió y disfrutó cada minuto. Al final, los músicos compartieron con los asistentes, se tomaron fotos, intercambiaron saludos y sonrisas. Somos latinos, pues.