Kiev, Ucrania.- Las fuerzas armadas ucranianas desean movilizar hasta 500.000 efectivos más para luchar contra la invasión rusa, pero el presidente ucraniano Volodymyr Zelensky declaró el martes que les ha pedido presentar sus planes con detalle sobre “un tema sumamente sensible” antes de decidir sobre si aceptarles la petición.
Una movilización de esa magnitud le costará a Ucrania unos 13.400 millones de dólares, indicó Zelensky. Otros aspectos a ser considerados incluyen si los soldados actualmente en el frente serán rotados o relevados para que puedan ir a casa tras 22 meses de guerra.
Las estadísticas del Ministerio de Defensa de Ucrania señalan que el ejército contaba con casi 800.000 efectivos en octubre. Ello no incluye a la Guardia Nacional ni otras unidades. En total, un millón de ucranianos visten el uniforme.
Hace pocos días, el presidente ruso Vladímir Putin ordenó a las fuerzas armadas de su país aumentar sus filas en 170.000 efectivos para un total de 1,32 millones.
El frente entre Rusia y Ucrania, de unos 1.000 kilómetros (600 millas) de largo, apenas se ha movido este año luego que una contraofensiva ucraniana se topó con una dura defensa rusa. Ahora que acecha el invierno, los desplazamientos de tropas se aletargan por el mal clima, lo que desplaza la prioridad hacia la artillería, los misiles y los drones.
Putin declaró el martes que las fuerzas rusas han tomado la iniciativa en Ucrania y están en buena posición para el año entrante.
Zelensky, en conferencia de prensa de fin de año, insistió en que las fuerzas rusas fracasaron en su intento de ocupar más zonas de Ucrania desde su invasión plena lanzada el 24 de febrero de 2022.
No fue posible verificar de manera independiente las evaluaciones del frente de batalla ofrecidas por las partes.
Zelensky declaró que Ucrania ha recibido más sistemas antiaéreos Patriot y NASAMS, lo que le da protección de rango medio y largo contra los ataques misilísticos rusos, pero no dio más detalles. Los sistemas ayudarán a Ucrania a repeler los anticipados ataques rusos contra su infraestructura eléctrica durante el invierno.
JFF