Celaya, Guanajuato.- Con un partido a puerta cerrada e Irapuato con un jugador menos, el marcador final del encuentro entre Lobos ULM VS Club Irapuato quedó empatado a cero. Los aficionados freseros se reunieron afuera del estadio Sergio León Chávez para disfrutar del partido que se llevó a cabo en Celaya.
La jornada 19 se realizó a puerta cerrada por decisión de la directiva del equipo Lobos ULM, en el estadio Miguel Alemán Valdés se notaba el silencio y únicamente se escuchaban los gritos de los jugadores y las instrucciones del cuerpo técnico de ambos equipos.
Desde el inicio del partido, las dos cuadrillas mostraron un buen desempeño buscando el balón y creando oportunidades para hacer al menos una anotación que jamás llegó.
El primer tiempo transcurrió con solo acercamientos a las porterías y tiros que no lograban colocar el balón dentro de ninguna portería.
Fue hasta el segundo tiempo que se vieron algunas modificaciones por parte de los freseros; en el minuto 66 realizaron su primer cambio de jugadores, saliendo del terreno de juego Rafael Rodea y entró Luis Araujo; diez minutos después salió Josué Zazueta y se incorporó Axel Pacheco.
Al minuto 80 el árbitro hizo sonar el silbato y enseguida sacó una tarjeta roja para Adolfo Hernández, pues entre el minuto 80 u 82 del juego se lanzó contra un jugador de Lobos, durante un saque en el área del equipo celayense.
Con diez minutos restantes, Irapuato se quedó con un jugador menos y para el minuto noventa se agregaron otros cuatro, sin embargo, ni la trinca ni los Lobos pudieron lograr una sola anotación, obteniendo un marcador final empatado a cero goles.
Hijos de la Mermelada se reunieron para ver el partido
Momentos antes de que iniciara el encuentro entre el Club Irapuato y Lobos ULM, los Hijos de la Mermelada se dieron cita afuera de la puerta seis del Estadio Sergio León Chávez en Irapuato, donde se colocó una pantalla para disfrutar del partido.
Cientos de fanáticos acudieron vistiendo los colores del equipo, junto a sus familias, y obviamente no faltaron los tambores y las banderas para demostrar el apoyo al equipo desde casa, pues el partido fue a puerta cerrada y los planes de ir a apoyar a la trinca en Celaya fueron cancelados.
Con una carnita asada, bebidas, gritos, brincos y porras los freseros no dejaron de alentar al club fresero.