Tal y como sucedió en el primer juego de la serie, las Bravas de León encontraron tarde el macaneo idóneo para hacerle daño a Charros Femenil y sufrieron su segundo descalabro del 2024. 

Con pizarra de 4 a 3, el segundo fue casi una calca del primero, sino es por Yuruby Alicart, quien se encargó de romper el cero con un jonrón solitario en su primera aparición de la noche. 

Posterior a ello, Bravas respondió con dos sencillos consecutivos de Patricia Ponce y Daisy Muñoz, quienes iniciaron el daño a Dayra Sandoval, pero no trascendió a mayores gracias a un doble play que vino del bate de Kimberly Hurtarte. 

Aunque Darlys Pérez trató de asentarse sobre el montículo, tuvo que bajarse del mismo tras un espacio de 2.1 entradas, donde recibió dos hits, otorgó tres bases por bola y recetó dos ponches. 

Darlys, con el ’10’, mientras lanza la bola. Foto: Ángel Corona.

Es allí cuando llegó Diana Belman, la salmantina que sacó los dos outs restantes en la tercera, retiró sin problemas en la cuarta y salió de una casa llena en la quinta, pero recibió un rally de tres carreras en la sexta. 

Mientras tanto, a la ofensiva, las de Adriana Pérez tardaron en descifrar la debilidad del rival y no fue hasta la séptima y última entrada donde respondieron con un rally de tres carreras después de ocho turnos sin pegar de hit. 

Jennifer Pocena y Marlene Espinoza con sencillos; Diana Árcega provocando el error de la serpentinera con un batazo corto pero muy venenoso; Alejandra Gastélum impulsando dos carreras gracias a un imparable y Mariangel Barbosa, jardinera central, impulsando la tercera, fueron las protagonistas de la reacción leonesa. 

Aunque metieron cierto tipo de presión a las jaliscienses, quienes tuvieron que echar mano de la calidad de Yeraldin Carrión para apagar el fuego, la reacción volvió a ser tardía.

Bravas reaccionaron, pero lo hicieron tarde. Foto: Ángel Corona.

Y es que, en estos dos primeros juegos en el Domingo Santana, se demostró que existe muchísima calidad en el roster cuerero, más no respuesta temprana en conjunto que pueda marcar la diferencia antes de los últimos rollos. 

La urgencia de ajustar para atacar es primordial y ojalá, en su primera aventura en carretera en Jalisco ante Charros Femenil, se pueda dar desde la apertura del juego; de lo contrario, es probable seguir con esta inercia. 

Sé que esto es un proceso, sin embargo, la temporada es muy, pero muy corta y, en consecuencia, el margen de error es igual o hasta menor. 

Aún y con estas derrotas, la sensación es buena, pues se demuestra que hay capacidad de reacción y da la impresión de tener un equipo muy competitivo que le puede hacer frente a Sultanes Femenil, Diablos Rojos Femenil y el mismo Charros Femenil. Será cuestión de ajustar, ajustar y ajustar. 

-El Dugout del Gabo. 

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