Una familia fue masacrada por presuntos sicarios en el Municipio de Yécora, al oriente de Sonora, en los límites con el estado de Chihuahua, la tarde del pasado sábado 3 de febrero.
Las víctimas fueron identificadas como Julieta Valenzuela, de 40 años; María Estefanía Valenzuela Jiménez, de 24 años, y Julián López Valenzuela, de apenas 2 años de edad.
El ataque ocurrió en la localidad de Mayboca, cuando el vehículo en el que circulaban Julieta, Estafanía y Julián, fue interceptado por un grupo de hombres a bordo de dos camionetas que descargaron sus armas en su contra.
Julieta y Julián murieron en el lugar, mientras que Estefanía perdió la vida tras ser trasladada al hospital.
Julián usó una corona y vistió un pequeño saco y una corbata para celebrar su cumpleaños número 2 el pasado 22 de octubre.
La Fiscalía General de Justicia del Estado informó que abrió una carpeta de investigación y que lleva a cabo las investigaciones conducentes con el objetivo de establecer las circunstancias de ataque.
Además, indicó que trabaja en colaboración con su homónima de Chihuahua.
“Nos unimos al dolor de los familiares y amigos de la comunidad de Maycoba, Dios les de pronta resignación y consuelo“, expresó en redes sociales el Ayuntamiento de Yécora.
Por su parte, la Diócesis de Ciudad Obregón también lamentó el multihomicidio de las dos mujeres y el niño.
“Con gran dolor nos unimos a nuestros hermanos de Maycoba, Municipio de Yécora, por el sensible fallecimiento de: María Estefanía, Julieta y Julián“, manifestó.
De acuerdo con reportes extraoficiales, el crimen habría sido perpetrado por miembros del grupo criminal Gente Nueva de Agua Prieta, una nueva alianza independiente conformada por miembros de Los Salazar, Los Paredes y Los Cazadores, células vinculadas anteriormente al Cártel de Sinaloa.
Ese mismo día, el convoy que atacó a los integrantes de la familia Valenzuela realizó al menos tres ataques contra vehículos que circulaban por la carretera Yécora-Maycoba.
DMD