La tradición de lanzarse agua el Sábado Santo no está relacionada con la religión o con la Biblia, pues solo es una costumbre popular, afirmó el párroco de la basílica de Santa María de Guadalupe, La Villita, en Pachuca, Tomás Roque Cruz.
Durante décadas existe ese hábito, pero no está vinculado a las celebraciones cristianas, explicó.
En la creencia religiosa hay un ritual que se llama la vigilia pascual del Sábado Santo en que se rocía por la noche con agua bendita a la feligresía.
Pero esa liturgia se deformó en los cubetazos que no están relacionados propiamente con la religión, expresó el sacerdote.
SUPUESTA PURIFICACIÓN
Así que ni se recomienda ni tiene un sentido de “purificación” la práctica de mojarse el Sábado Santo, detalló el párroco en entrevista para AM Hidalgo.
Por otra parte, autoridades de la Comisión de Agua y Alcantarillado de Sistemas Intermunicipales (Caasim) han advertido que habrá multas de entre mil 302 pesos hasta 6 mil 514 pesos contra los que desperdicien agua el Sábado Santo o cualquier otro día del año.