Moroleón, Guanajuato.- Mantener las cabezas de ganado en Moroleón se está haciendo un reto casi imposible para los ganaderos de la cabecera y las comunidades, a tal grado de que aseguran que si este año nuevamente se presenta la sequía, se verán obligados a vender la mayor parte de sus animales.
Los trabajadores del campo refieren que es cada vez más difícil conseguir agua para darles a sus vacas o reses que se ven en la necesidad de llevarlas a las presas o pequeños canales para que se hidraten, además de que aprovechen para alimentarse del pasto en zonas cerriles.
Desde el año pasado se puso muy canija la situación, no tenemos ya para estar pidiendo pipas, tenemos que llevar a los animales a que tomen agua de donde encontramos, mucha gente ha estado vendiendo sus animales, pero ofrecen muy poco, también se aprovechan de que la estamos pasando difícil”, expresó Ernesto Zúñiga, ganadero de la comunidad de El Salto.
Otros jornaleros aseguran que también las pacas de alimento y las medicinas para el ganado se encarecieron desde el año pasado, lo cual ha venido dificultando sus posibilidades de mantener, económicamente hablando, sus cabezas de ganado.
“Los bordos en todos los ranchos están secos ya, por eso si este año no llueve y no se recuperan, vamos a estar muy apretados en el presupuesto para mantener a los animales, no vamos a tener de otra más que venderlos, pero bien baratos porque están flacos por lo mismo que les falta agua y alimento”, manifestó Irineo Domínguez, ganadero y agricultor de la cabecera municipal.
“Urge que llueva, si no vamos a tener que buscar hacer otra cosa porque ni el ganado, ni el cultivo se nos va a dar con tanta sequía”, agregó Vicente Díaz, trabajador del campo.
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