En 33 de los 46 juegos que han disputado los Bravos de León en la temporada 2024 de la Liga Mexicana de Beisbol (LMB), Marco Chicuate ha brillado como el jugador más consistente del roster principal. 

En su aniversario número 12 como pelotero profesional, el mochitense registra los mejores números de su carrera gracias a un average de .364 con tres jonrones y 18 carreras impulsadas, además de 10 bases por bola. 

“Todos los peloteros exitosos tienen una rutina, donde desechan lo que no les sirve y absorben los aprendizajes para bien”, menciona Chicuate antes de jugar como titular en el tercero y último de la serie ante Charros de Jalisco. “Este año he tenido la oportunidad de demostrarme y, en algo muy personal, antes me he ganado un lugar y no me lo habían respetado y es algo normal, pero ahora, saber que soy parte fundamental del equipo como pieza clave, es un plus y me orilla a doblegar mi esfuerzo y responsabilidad”. 

Esos valores, que menciona en una etapa importante de madurez a sus 31 años de edad, se empezaron a forjar desde los cuatro años de edad, cuando se adentró a las ligas pequeñas de su natal Mochis. 

“Llevo toda mi vida siendo cátcher, recuerdo que en el equipo como que nadie quería ocupar la posición por los pelotazos y lo que tu quieras (risas), pero le dijeron a mi papá y también estuvo de acuerdo por la protección de los arreos sin saber que luego hay golpes más duros”. 

Chicuate, quien estuvo en las sucursales de los Diablos Rojos del México y tuvo intereses esporádicos de equipos de la LMB antes de firmar por los Broncos de Reynosa en 2012, es el único jugador que integró la primera plantilla de los Bravos de León durante su regreso en 2017.

“Recuerdo que Ramón Esquer, con quien hoy tengo la fortuna de compartir clubhouse, estaba de gerente deportivo de Reynosa, y cuando llegué y me probé, a los dos días me dieron mi contrato y de inmediato comencé mi carrera”. 

Foto: Bravos de León.

El trayecto no ha sido sencillo y se ha caracterizado por experimentar en todos lados hasta encontrar la estabilidad que hoy goza en León. 

El aprendizaje comenzó dos años después de la mudanza a León, en 2019, cuando se marchó a la zona norte con los extintos Generales de Durango, donde bateó para un pobre .077 al solo impulsar una carrera y pegar un doble en 14 apariciones al plato que pudo recabar en cinco juegos.

Un año después, en 2021, aterrizó en Tijuana para jugar con los Toros. Allí tampoco encontró regularidad con solo siete hits y dos impulsadas en 16 juegos, donde bateo para .269.

En 2022 regresó a León, pero luego de 31 juegos de .287 con 29 hits, cinco jonrones y 13 producidas, fue cambiado, de nuevo, a Tijuana. Sin embargo, su nivel decayó. Solo participó en 14 juegos y pudo pegar seis imparables e impulsar tres carreras que le provocaron un promedio de .240. 

Chicuate en el norte del país con los Toros. Foto: Toros de Tijuana.

Tras ese amargo cierre, el regreso y, por fin, la tan ansiada estabilidad. En 2023, se enfocó puramente en Bravos y los números hablaron por sí solos: .286, 40 hits, dos jonrones y 20 producidas. 

Ahora, en la actualidad, en esta segunda vez que hila dos temporadas con los Bravos de León, nos damos cuenta del trabajo que está enfocado en escalar y mejorar su potencial a niveles muy superlativos en lo personal. 

“Es muy padre voltear atrás y ver cómo, a pesar de que han pasado varios jugadores en esta franquicia, yo soy el único que permanece en esta organización. Estoy muy agradecido con Bravos por darme la oportunidad y, sobre todo, por la estadía aquí”. 

Consciente de que está encaminado a ser el pelotero franquicia de los Bravos de León, Marco Chicuate agradece el cariño de la afición, pues “ver el cómo esa afición te apoya es una motivación extra para sacar el cien por ciento en todos los juegos y comprometerte al doble con la organización”. 

Con el aire nostálgico de extrañar a su familia y ese condimento de la comida casera que lo acompañó durante muchos años, el receptor mexicano, que juega en invierno para los Mayos de Navojoa en la Liga Mexicana del Pacífico (LMP) y amaneció como líder de bateo el miércoles 29 de mayo al irse de 4-4 con dos impulsadas en el primero de la serie en Monterrey ante Sultanes, se siente aún más comprometido dentro del entorno de los Bravos de León, donde está encaminado a escribir la mejor temporada de su carrera al ser el sexto mejor promedio de bateo de toda la LMB (.364) después de 46 juegos. 

“Agradecerles a todos los fanáticos por su apoyo, pedirles que sigan viniendo al estadio y que estén seguros que Marco Chicuate y los Bravos de León, van a dejar toda el alma en el terreno de juego porque todo es para ellos”. 

*Estadísticas hasta las 5:00 pm del sábado 8 de junio del 2024. 

-El Dugout del Gabo. 

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