Nada contento con la dirigencia nacional del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Roberto Pedraza Martínez, exsenador, exdiputado y expresidente municipal en Hidalgo afirma que su partido no está extinto y que su actual presidente Alejandro Moreno debe irse.
MOVIMIENTO POR LA NO REELECCIÓN
El Partido Revolucionario Institucional (PRI) tuvo su origen en la Revolución Mexicana cuyo principal postulado fue la no reelección, mencionó.
AMBICIÓN DE PODER
Paradójicamente, Alejandro Moreno conocido como ‘Alito’ pretende reelegirse “por ambición de poder”, expresó.
NI AUNQUE LO EXPULSEN
Pedraza Martínez quien ha mostrado su desacuerdo con la intención del líder priista de permanecer indefinidamente, dijo que aunque lo expulsen seguirá siendo tricolor.
PROTESTAS PREVIAS
Junto con otros militantes, entre ellos, los expresidentes del partido Aurelio Marín Huazo, Edna Geraldina García Gordillo y Jaime Costeira Cruz, además del exgobernador Francisco Olvera Ruiz se pronunciaron contra los intentos de reformar los estatutos con fines de grupo.
SEMBRANDO ENEMIGOS
“No puede ejercer un liderazgo quien siembra enemigos a su paso, así no se puede gobernar ni dirigir”, añadió Pedraza Martínez.
Descartó que el PRI como partido pueda desaparecer a pesar de las intenciones de eternizarse en el cargo de Alejandro Moreno.
EL DINOSAURIO ESTABA AHÍ
En el año 2000 con el triunfo del panista Vicente Fox los diarios vaticinaron que el PRI estaba muerto.
Luego con la llegada de Felipe Calderón también del Partido Acción Nacional (PAN) se decía que “al dinosaurio lo habían rematado”, comentó Pedraza.
Esas afirmaciones fueron desmentidas cuando ganó las elecciones Enrique Peña Nieto, observó el exdiputado federal.
Ahora se dice lo mismo “pero el tricolor es un partido sólido, con historia y con militancia leal”.
CAUDILLISMO
“Estoy convencido que el partido no puede ser de un sólo hombre ni se puede tolerar que denoste a quienes piensan diferente”.
LAS MOTIVACIONES
Afirmó que quien llega o permanece en un partido lo hace por tres razones:
Por convicción como fue Heberto Castillo quien siempre militó en la izquierda
Por conveniencia de quien pretende obtener beneficios
O por necesidad cuando por la urgencia de trabajo pone al margen su ideología, explicó.
“Yo me quedo en el PRI por el primer motivo. Soy un priista convencido”.