No se requiere de una fecha específica para celebrar la amistad, ni tampoco que las almas gemelas sean exclusivas de las relaciones románticas, creo que la amistad puede llegar a ser igual de significativa.
Los amigos pueden trascender en el tiempo, vivir situaciones que nos vuelven incondicionales, porque en nuestras distintas facetas se fortalecen y nos permiten ser auténticos, sin pretextos, sin prejuicios y comparten a lo largo del tiempo nuestra vida, sin idealizar como sucede con el amor de pareja.
Obvio, no soy la única que cuenta con amistades de la infancia, afortunadamente muchas de las personas de mi entorno han compartido su andar con uno, dos o más amigos que en cada etapa de su vida los ha acompañado y querido. La lealtad es la característica más importante y natural que se genera en este tipo de vínculo, que puede llegar a ser mucho más duradero y poderoso que cualquier otro tipo de relación.
No es casualidad que las redes sociales hablen mucho de los y las amigas, que muestren a través de videos lo que una persona puede ser capaz de hacer por el simple hecho de compartir una amistad. En este tema, la complicidad juega un papel básico, une de manera única y especial a la gente, es el entendimiento sin palabras, un lenguaje secreto, es una especie de código donde se promueve la esencia y confabulación en el mejor de los sentidos, da pie a la creación de una red de experiencias que se comparten y en donde se tejen hijos no perceptibles a la vista, pero lo suficientemente fuertes que nunca se rompen, donde reina la confianza total, es el arte de ser y dejar ser.
El impacto que los amigos otorgan a nuestra vida es transformador, es como reflejarnos en un espejo y observarnos en otra persona, que se convierte en nuestro apoyo constante y trasciende de manera indispensable en nuestro existir.
A través de un entendimiento profundo nos otorga un confort incomparable, celebran logros y otorgan consuelo con la misma intensidad, la comunicación resplandece en la honestidad y fomenta el crecimiento y éxito, sin duda, nos encamina a nuestra mejor versión al funcionar como revelador de verdades incómodas, sentido de pertenencia y red de apoyo.
Sé que muchos se identificarán con este texto, conozco a varias almas gemelas que tuvieron la fortuna de identificarse y se han comprometido a ser mejores amigos, con el tiempo, se han vuelto más cuidadosos porque saben que en su vida cuentan con un gran tesoro.