Si para un adulto es difícil ser humillado, discriminado o sufrir hostigamiento, para una niña o niño es peor, comentó una exmaestra del Instituto Henry Wallon de Pachuca.

Luego de darse a conocer el presunto maltrato infantil por parte de una maestra de dicho instituto contra una niña de nivel preescolar, la docente decidió “levantar la voz”, dijo, para evitar que existan más casos de maltrato.

Mencionó que laboró en el colegio particular durante un ciclo escolar y tuvo que salirse debido a los malos tratos que recibió por parte de las coordinadoras y directora en turno.

INGRESÓ A TRABAJAR COMO ASISTENTE DE MATERNAL

En entrevista para AM Hidalgo la maestra quien es licenciada en psicopedagogía pidió reservar su nombre por miedo a más represalias por parte del personal de la escuela.

Recordó que ella llegó a laborar al Instituto en agosto de 2018 como asistente maternal, y a los dos meses en octubre le asignaron un grupo como docente de preescolar.

“Al principio todo bien, en ese entonces la maestra Rocío que la conocen como ‘miss Chío’, me dijo que me iba a apoyar y guiar”, refirió.

REUNIÓN SEMANAL PARA HUMILLARLA

Sin embargo, no pasó mucho tiempo cuando la directora de preescolar, la dueña de la escuela, la coordinadora académica, entre otros, la reunían cada semana para humillarla y decirle que no les servía su trabajo.

Le quitaron el grupo y la mandaron como asistente en primaria, y la directora le insistía en que ella no servía como maestra sólo para cuidar niños, y continuaba el hostigamiento.

“Me hicieron sentir que todas mis acciones estaban mal, me hicieron sentir que yo tenía la culpa de muchas cosas, me aislaron”, relató.

PRESENCIÓ DISCRIMINACIÓN

La afectada comentó que en su casa le inculcaron el trato igual a todas las personas, pero en la escuela le llamaban la atención por hablarle al chofer, al vigilante o al señor de mantenimiento, porque según sus superiores “había niveles”.

Consideró que si no les servía su trabajo la debieron despedir, pero la seguían humillando y hostigando, y casi al final del ciclo escolar la mandaron con un trapo a la biblioteca a limpiar libros y estantes, cuando sabían de su alergia al polvo.

Mencionó que muchas veces estuvo a punto de no ir a trabajar, pero su ética profesional no le permitió dejar a los alumnos, e incluso había una niña con déficit de audición y lengua con la que se comunicaba con lenguaje de señas.

TRES DOCENTES ACOSADOS LABORALMENTE

Fue hasta que terminó el ciclo escolar que dejó de laborar en el Instituto ubicado en Mineral de la Reforma, y supo que también se salieron dos docentes más, una de inglés y otro de educación física que también padecieron acoso laboral.

“Hoy decidí alzar la voz de manera anónima porque veo lo que están haciendo con los niños, y si para mí como adulta fue muy difícil, imagínense para un menor de cinco años, no es correcto”, aseveró.

Cabe recordar que la semana pasada, familiares de una niña de cinco años bloquearon el bulevar Felipe Ángeles, en Pachuca, exigiendo el cierre definitivo de la escuela particular Henry Wallon.

Por el presunto maltrato de una maestra contra la menor de edad, a quien dejó parada durante una hora, y de acuerdo con la madre, la docente humilló a su hija frente a sus compañeros y le quitó la silla el 5 de junio de este año.

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