Celaya, Guanajuato.- Aunque existe un protocolo de acción ante situaciones de riesgo, las escuelas cercanas a la masacre del lunes en el Centro de Celaya no fueron cerradas ni suspendidas las clases porque no hubo amenaza directa contra los estudiantes, aseguró la Secretaría de Educación de Guanajuato (SEG).

Jorge Enrique Hernández Meza, titular de la SEG. Foto: Martha Silva

Se informó que dentro en la página de la SEG hay un chatbot, un programa informático que simula una conversación “normal” con cualquier persona que lo solicite, que dicta recomendaciones puntuales al docente o cualquier persona, según un tema.

“Hay una serie de protocolos establecidos, uno de ellos, que está vigente y donde se ha capacitado mucho, es en el tema de balaceras, inundaciones, cosas que lamentablemente se están presentando. Hay un chatbot, que se llama Mari y Armando Paz, los maestros tienen acceso a él, con solo poner la palabra balacera les da de principio a fin todas las acciones”, comentó Jorge Enrique Hernández Meza, titular de la SEG.

Pero reconoció que “cuando hay un hecho delictivo cerca, cuando escuchan los balazos, cuando es afuera de la escuela, cuando es una situación (real) de riesgo, evidentemente ahí se cierra (la escuela)”.

En ese caso, la SEG valora la situación con la Secretaría de Seguridad Pública y con la Secretaría de Gobierno, y de ser necesario, se puede llegar hasta a suspender clases, si la amenaza es permanente. Sin embargo, eso no ocurrió en Celaya.

El funcionario destacó que los y las docentes, en general, han actuado de manera muy responsable, muy valiente.

Esperemos que no sea este un tema del que tengamos que hablar recurrentemente, pero sí decir que dentro de los protocolos centrales que tenemos para el desarrollo escolar, ese es uno de ellos”.

Jorge Hernández Meza recordó que el caso más sobresaliente de cierre de escuelas ocurrió en la comunidad de Barrón, en Salamanca.

Caso: Asesinan a 5 estudiantes de telebachillerato al salir de escuela en Salamanca

En ese lugar,  el 6 de junio de 2022, un grupo armado asesinó a cinco estudiantes de telebachillerato cuando salían de la escuela y a una mujer adulta mayor. Cuatro eran menores de edad. Las escuelas estuvieron cerradas varios días por precaución.

El propio Secretario de Educación reconoció en esos días que tanto los compañeros de las víctimas, sus familias y los tres maestros del telebachillerato presentaban afectaciones piscológicas severas, por lo que esa dependencia estaba brindando acompañamiento.

JRL

 

 

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