La Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) envió 300 integrantes del Ejército Mexicano a Hidalgo con el fin de reforzar el actual despliegue que mantiene el personal militar e inhibir las actividades de la delincuencia organizada.
Estos efectivos tienen la misión de colaborar con las autoridades locales y disminuir los índices delictivos mediante acciones conjuntas que permitan contribuir a la preservación del orden y la paz pública.
Realizarán tareas de disuasión, prevención, patrullajes y reconocimientos que generen un ambiente de tranquilidad en la población.