?De verdad, mis estimad@s lector@s, ¡es de los mejores y más inesperados regalos que Dios y la Vida, nos dan!. Parafraseando a nuestro querido Catón: “Si hubiese sabido antes lo que es ser Abuelo, hubiera tenido primero a mis nietos y, luego, a mis hijos”…
Bueno, yo, tal vez, no tanto… porque creo que el ser Mamá o Papá, te prepara para ser Abuel@… Te ayuda a no cometer los mismos errores que cometiste con tus hij@s: querer que crecieran más rápido; llenarlos de responsabilidades y clases; desear que sean “perfect@s” y no aceptarl@s tal cual son; preocuparte por mil nimiedades y olvidar lo importante, ¡gozarl@s!… ¡simplemente, gozarl@s!.
?Recuerdo cuando mis amigas empezaron a ser Abuelas, que me decían que era lo más maravilloso del mundo. Una de ellas, Lulú Aguilar, me dijo que. “Ser Abuela es sentir fuegos artificiales en el corazón”. Otro tío, Manolo, me comentó: “Es volverte enamorar”. Yo los oía, y torpemente pensaba: “¿Será?”… Y ahora que lo soy, me doy cuenta: ¡Es toooodo eso, y mucho más!”.
?La primera vez que tuve a mi Nieta entre mis brazos, lloré por el gran milagro de la Vida… yo tuve en mi vientre a su Mamá… y mi hija la tuvo en el suyo a ella… ¿puede haber algo más maravilloso y mágico?. Cuando llega a mi casa mi segundo nietecito, y se me abraza, y se me queda adherido a mi cuello, con su cariño, con su confianza, ¡vuelvo a sentir paz y felicidad!. Cuando el tercero, me sonríe pícaramente para compartirme del bocado que se está comiendo, ¡me sé poseedora de la mayor riqueza, la del amor!. Y como éstos, hay un pequeño milagro cada vez que los veo… lo que platican, lo que notan y te ayudan a descubrir, las pequeñas conquistas que los enorgullecen, las risas contagiosas, sus travesuras y carreras por la casa llenándola de nuevo de dicha…
L@s Niet@s te provocan a hacer cosas que nunca imaginaste o que tenías tanto tiempo sin hacerlas: gatear en el suelo, enlodarte, mojarte con la lluvia, ponerte a jugar como cuando eras niñ@, buscar y observar bichos, decir o balbucear tonterías, bailar como loc@ o cantar a todo pulmón… ¡te animan a ser tú… a sacar tu esencia infantil! ¡Y a gozar el momento!.
?Por eso, y ahora que festejamos el “Día de l@s Abuel@s”, me puse a hojear el libro que me regaló mi mejor amiga, Araceli Guerrero, el día que Dios me quiso tanto, que me dio el gran don de ¡ser Abuela!. Es el de Catón, Armando Fuentes Aguirre, “De Abuelitas, Abuelitos y otros ángeles benditos”. Y reuní algunas frases que me gustaría compartirles, para ayudarnos a ser más felices, más orgullosos y más conscientes, de la “Abuelez, Abuelitud, Abuelidad” (términos todavía no aceptados por la Real Academia Española).
?“Mi mayor gloria es ser Abuel@”.
?“Un dedito puede hacer con un Abuelo lo que ninguna mano u orden logró con el señor”.
?“Quiero dar a mis nietos, ahora que son pequeños, algo que no olviden: Quiero darles recuerdos”.
?“Los niños y los sabios comparten la misma sabiduría.”
?“Dios no es Padre… ¡es Abuelo!”
?“Un nieto es un seguro de inmortalidad”
?“Ser Abuelo es… ¡la paternidad irresponsable!”
?“Los nietos son el premio que Dios nos da, por no haber matado a nuestros hijos adolescentes.”
?“Ser Abuelo es la forma perfecta de ser Padre”.
?“Los niños son dueños del tiempo: conocen el valor del presente.”
?“Abrazarás a tu abuelo, y él sabrá que no son brazos los que lo ciñen, sino alas de un ángel de ternura que Dios puso en su vida como anticipación del paraíso”.
?“¡Bienvenida a este mundo, nietecita mía… no me habré portado tan mal si he recibido de Dios un regalo tan precioso como tú”.
?“Mírame, niño mío, para sentir que me está mirando Dios”.
?“Yo tomo en mis brazos a mi nieto, y es como si tomara en ellos mi propio corazón”.
?“Cada vez que nace una criatura el mundo vuelve a comenzar, y vuelve a comenzar la vida. Yo acuné a mi nieta en mis brazos, y era como acunar a una pequeña flor con pétalos de rosa y lirio. Toqué con reverencia tu manita y sentí en ella, todavía el calor de las manos de Dios”.
?“Duerme y sueña, nieto mío, en tanto que yo doy gracias a Dios por permitirme ser, aunque sea por un ratito, el guardián de tu sueño y de tus sueños”.
?“Miro el retrato de mi abuelo y pienso que no soy yo el primero. Veo jugar a mi nieto, y pienso que no seré yo el último”.
?“… ambos sabemos, él por niño y yo por viejo, que todo tiene su tiempo.”
?“Cuando tengo a este pequeñito entre los brazos la vida me tiene a mí en los suyos. Los dos, el niño y el viejo, somos frágiles. Los dos, el viejo y el niño, somos eternos”.
?“Una lágrima llorada por ti es todo el mundo del pesar para este abuelo tuyo que no quiere que te roce la tristeza”. (Y, ¡qué razón tiene!, si nos duele que nos lastimen a un@ hij@, ¡a un@ niet@, ¡mucho más!).
?“Criaturita que llegas con tus mañanas a mi tarde: eres para tu abuelo promesa de esperanza y don de fe. Cuando conmigo estés, sentiré que Dios está conmigo. Muy cerca de Él estamos los dos. Tú, porque acabas de salir de sus manos. Yo, porque me acerco ya a sus brazos. En los míos te dormiste ayer. En los suyos mañana yo me dormiré”.
?“Mi nieta está en mi mundo, como el regalo de un amoroso Dios”.
?“Pues no hay amor más completo que el de los Abuelos, quitando el de las Madres”.
?Todavía faltarían más frases, pero mejor l@s dejo que lean ése hermoso libro. Y creo que hasta podría hacer otro que se llame: “De nietecitas y nietecitos y otros ángeles benditos”. ¡Feliz día de l@s Abuel@s!.
JRL