Ciudad de México.- Irene Espinosa, subgobernadora del Banco de México (Banxico), instó ayer a no estropear los esfuerzos para potenciar el nearshoring ante al ruido político generado en los últimos días frente al avance de las reformas al Poder Judicial.
“Es importante la visión a largo plazo. No debemos detenernos por la coyuntura actual (propuestas de reformas). Debemos construir un marco institucional y la regulación para maximizar la oportunidad del nearshoring y el potencial de México para crecer”, expresó Espinosa en el segundo día de la Tercera Convención Binacional organizada por la American Society of Mexico.
Aseguró que el País requiere un financiamiento anual de 8 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) para alcanzar los objetivos de la Agenda 2030 de desarrollo sostenible, por lo cual deberá atraer inversiones que permitan aprovechar la relocalización de cadenas productivas.
“Cuando hablamos de nearshoring, México tiene retos sectoriales y tiene la necesidad de contar con un financiamiento suficiente hacia infraestructura, energía y agua.
“Para lograr los objetivos de la Agenda 2030 se requerirá de un financiamiento anual de alrededor de 8 por ciento del PIB. Necesitamos un financiamiento que sea de calidad y que promueva inversiones sostenibles”, indicó Espinosa.
La subgobernadora destacó que en los últimos cuatro años México creó un Comité de Finanzas Sostenibles en el que participan todas las autoridades financieras, bancos y Afores, cuyo objetivo es generar un sistema financiero que permita captar capitales con enfoque de sostenibilidad.
En el mismo foro, María Consuelo Pérez, directora general S&P Global Ratings Mexico, coincidió en que entre los retos de México para la relocalización se encuentra el estrés hídrico, lo que resta atractivo para que las empresas se instalen en territorio nacional.
“Los capitales no están quietos. Si no se dan las condiciones (acceso al agua y a energía renovable), las empresas se pueden mover a otra parte del mundo”, enfatizó la directiva de S&P.
HLL