Hay canciones que se filtran en lo más profundo de nuestro ser. Sin importar el tiempo, la música permea con nuestros recuerdos, tiene el poder de trasladarnos a lugares, momentos y personas; es un el hilo invisible clave en nuestra vida, esas melodías que representan en lo individual una marca personal y que nos remonta a situaciones especiales para cada uno, una banda sonora con un repertorio favorito de nuestra existencia, el cual captura emociones, encapsula memorias de manera mágica, con la cualidad de irse incrementado constantemente. Este acompañamiento musical, se adapta a nuevas etapas, influencias y el contexto que nos rodea y tiene mucho que ver con las tendencias de este arte.
Imagina una playlist que empieza en tu infancia, con las canciones que escuchabas en casa, en la radio, en el coche en algún paseo familiar, seguramente compaginarás con los amigos de tu misma edad, y conforme pasaron los años incluiste artistas favoritos, de acuerdo a tu estilo y preferencia esa lista tiene un impacto, por todo lo vivido, experiencias que aportaron a tu estilo y formaron tu personalidad y que seguramente permanece en tu gusto y se han convertido en arte central de tu existir.
Cada etapa en el desarrollo de las personas cuenta con matices diversos, y la música es protagonista en muchos de ellos; su misión: entrelazar instantes de éxito, pérdidas, dolor, soledad y la mayoría de felicidad o de la rutina del día a día, por lo que el valor de cada canción varía dependiendo de lo representativo que sea el momento que evoca en nuestras vidas, y lo que la hace tan especial son las personas que estuvieron presentes.
En la actualidad somos afortunados porque las plataformas digitales nos han facilitado el poder encontrar y crear listas personalizadas, sin duda son reflejo de las épocas que hemos pasado, con la gran ventaja de revisarla y reconectar con lo que fuimos, somos y en el futuro seremos.
¿Qué canciones formarían parte de tu top ten en tu soundtrack personal?