Irapuato, Guanajuato.- El pasado viernes 13 de septiembre, Iris, una mujer trans de 47 años, recibió una puñalada de parte de la pareja sentimental de una compañera sexoservidora. En entrevista, Iris dijo que lo que más ha padecido es la poca empatía que han tenido con ella, tanto en el Hospital General de Irapuato, como en la Fiscalía, debido a su identidad de género.

“El viernes a las 12 de la tarde, con otra compañera llegamos al Hospital General, pero no supe si eran pasantes o doctores, porque entre ellos se decían que me atendieran.

Yo creo que así no son formas de tratar a alguien que llega herido, además me agarran y me meten los dedos en la cortada, y les pregunté ‘¿por qué haces esto?’. Me dijeron ‘tengo que ver que no te hayan lesionado nada’, les dije que me estaban lastimando y con una sola gasa me quitaban la sangre, yo les dije que utilizaran otra, pero me dijeron que no había, yo no quiero creer que me trataron así por mi condición trans, pero la verdad es que no es justo como me trataron”, afirmó. 

Alrededor de las 3 de la tarde de este viernes, el personal del Hospital General de Irapuato, la dio de alta, pero primero le preguntaron si tenía IMSS, a lo cual Iris dijo que no, entonces para no cobrarle la atención que recibió en el Hospital General, la mandaron a sacar su documento de no derechohabiente.

 “Así con un dolor insoportable fui al Seguro Social y regresé al Hospital General, donde les pedí que si me podían dar medicinas para el dolor y la vacuna del tétanos, pues la puñalada que recibí fue con un objeto que no se veía limpio, pero me dijeron que ahí en el hospital no tenían y debía ir al Caises de Torres Landa.

“Y así con el dolor y lo mareada llegué hasta el Caises, donde me pidieron mi credencial para votar que sí llevaba y la CURP, pero esto no lo tenía, así que me hicieron ir a una papelería para entregarlo, pero igual como eran ya después de las 4 de la tarde, solo me dieron paracetamol y penicilina, pero la vacuna del tétanos me dijeron que luego viniera, porque dura muchos años una vacuna que me haya puesto antes”, mencionó Iris.

Agregó que no solamente ahí recibió un trato discriminatorio por ser sexoservidora y trans, pues en las oficinas de la Fiscalía del Estado en Irapuato, su denuncia por los hechos se la tomaron hasta el 17 de septiembre, 5 días después del hecho, debido a que el fin de semana era “puente” y los trabajadores de la Fiscalía no estaban.

Yo creo que todos somos hermanos y seres humanos, para que nos traten así, porque a uno no pueden traerlo de aquí para allá en ese estado, donde hay dolor y uno anda mareado, además no pedía algo extra, tan solo que me atendieran bien, pero creo que aun si hay discriminación por lo que uno es o hace y eso no debe ser”, señaló.

AM buscó una respuesta a esta denuncia en la Secretaría de Salud de Guanajuato, a través del área de Comunicación Social que indicó el registro de entrada de Iris al Hospital es a las 14:20 del viernes.

“Ingresó al servicio de urgencias a las 14:20 horas el 13 de septiembre, posterior a subir herida de abdomen por arma punzocortante, se comenzó inmediatamente con atención médica de acuerdo al protocolo ATLS (método de atención a pacientes traumatizados, por sus siglas en inglés).

Además se le aplicaron estudios de laboratorios y se le hizo un ultrasonido abdominal asociado a lesión, posteriormente se solicitó una interconsulta al servicio de cirugía, pero a eso de las 4 de la tarde al llamarla para continuar su atención no se encontró en el servicio, por lo cual se dio aviso al Ministerio Público”, indicó la Secretaría de Salud.

La dependencia agregó que para realizar un ultrasonido y hacer la curación de la herida se requiere material médico suficiente como gasas, algodón, agujas, etc., que se encuentran disponibles en el Hospital General y fue usado para la atención del paciente, quien por su pie se retiró antes de la interconsulta para el servicio de cirugía.

DAR

 

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