Para que el agua de lluvia llegue hasta el subsuelo y alimente los mantos freáticos, el periodo promedio es de 25 a 30 años, aproximadamente, por lo que es urgente la implementación de mecanismos y tecnología para usar el recurso natural disponible eficiente y responsablemente.     

El planteamiento es realizado por Ricardo Hernández Pérez, presidente del Comité Directivo de la Asociación de Usuarios del Módulo 1 de Aguas Blancas del distrito de Riego Tulancingo A.C.

Mencionó que el cultivo de hortalizas, granos, legumbres, entre otros productos, ocupa buena parte del agua disponible en acciones de riego.

Por lo que insistió en la adquisición y uso de niveladoras láser, con lo que se haría más eficiente el uso del agua para riego, lo que generaría ahorros del recurso.

AHORRO DE AGUA

Hernández Pérez dijo que en promedio se usan alrededor de 432 metros cúbicos de agua en un tiempo de tres horas para el riego de una hectárea de cultivo.

Con el uso de niveladoras láser se puede hacer más eficiente el uso del recurso hídrico, pues dejarían de extraer paulatinamente 17 millones 280 mil metros cúbicos de agua para riego.

La cifra de ahorro se considera a partir del riego de 10 mil de las 28 mil hectáreas para ese propósito que tiene el acuífero del Valle de Tulancingo en un periodo de dos años.

Si se agrega un año más en el uso de la tecnología de riego incluso podrían abatir el déficit de disponibilidad de agua que tiene el acuífero, que actualmente alcanza los 22.6 millones de metros cúbicos anuales.

MEJORA EN CONDICIONES AGRÍCOLAS

Además del aprovechamiento del agua disponible y su ahorro, se podría ampliar la superficie para riego agrícola.

“Con eso habría otros beneficios: una mejor calidad de vida para los productores al incrementar sus ingresos y para la población en general, disponibilidad de agua las 24 horas del día”.

En promedio, una niveladora láser tiene un costo aproximado de 6 millones de pesos.

El entrevistado anunció que en breve buscarán reunirse con gobiernos municipales para plantearles que sean estos los que adquieran los aparatos y los productores agrícolas los usarían a partir del pago de una renta.

“Sí es un beneficio productivo, pero también lo es para aprovechar de mejor manera el agua con la que se dispone”, enfatizó.

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