Con la palmera natural como sombrero y donde fue detenida en el centro de Acaxochitlán, luce la catrina que podría ser la más grande exhibida en estas fechas, con ocho metros en técnica de cartonería y dos metros más de base.
Corona y ojos de flores, blusa, enredo y fajilla como la vestimenta de la población original de ese Pueblo Mágico, es el diseño del adorno que además tiene ante sus pies un tapete de aserrín que les ha dado la fama internacional.
Al frente hay un colorido altar y más catrinas diseñadas por maestros y alumnos de diferentes escuelas acaxochitecas.
Resalta una que en su enagua lleva la imagen del templo dedicado al señor del Colateral con un tradicional camino, además de otro de los trajes típicos que se conservan en esa región náhuatl.
Así como la del Consejo Municipal del Deporte (Comude), que está sentada en una silla de ruedas, cuyo mensaje que dio a conocer la directora Laura Vargas, es la importancia de la inclusión del deporte adaptado.