La Secretaría de Salud de Hidalgo (SSH) trabaja en el protocolo denominado código infarto cuyo principal reto es hacer la planeación correcta del eje de la rectoría y del presupuesto para el 2025.
Vanesa Escalante Arroyo titular de la SSH indicó que hasta la fecha no tienen la cantidad del Presupuesto que le corresponderá a la Secretaría tras la incorporación al IMSS Bienestar.
Además, dio a conocer que solicitaron 40 millones de pesos para la conclusión del Laboratorio Estatal de Salud Pública construido en la pasada administración y que sigue sin operar.
REALIZAN PLANEACIÓN DEL GASTO PARA 2025
La funcionaria estatal informó que el pasado 2 de diciembre sostuvo reunión con personal de planeación de la Secretaría de Salud federal, y con representantes del IMSS Bienestar, IMSS ordinario y del ISSSTE para ver cómo cerrarán el año.
“Estamos trabajando en un protocolo que es el código infarto para empezar a tener la planeación correcta para el eje de la rectoría del siguiente ejercicio fiscal”, refirió.
Mencionó que el protocolo incluirá el diagnóstico y evaluación del estado de algunas instalaciones, ya que personal del ISSSTE acudió a verificar cómo se encuentra el Hospital General de Pachuca, o del IMSS Ordinario al IMSS Bienestar.
MÁS TOMÓGRAFOS Y RECURSOS HUMANOS
Detalló que parte de las necesidades en el sector salud que buscarán subsanar con el presupuesto del próximo año son tomógrafos, más recursos humanos, y concluir proyectos que permitan dar a las y los pacientes mejor atención.
“Trabajamos de la mano con la Secretaría de Hacienda estatal para verificar los proyectos estratégicos, uno de ellos es el Laboratorio de Salud Pública que buscamos más de 40 millones que se puedan presupuestar para el siguiente ejercicio fiscal”, externó.
El recurso, dijo, será para concluir el laboratorio que está pendiente desde hace tiempo, el cual se inauguró en el gobierno anterior a un costado del nuevo Hospital General de Pachuca, pero que en ambas obras se detectaron irregularidades que impidieron su operación.
Recordó que detectaron vicios ocultos en la infraestructura, e incluso con las lluvias de este año se cayeron los plafones y se filtró el agua.