BanBajío representa una historia de éxito. Su origen se remonta a hace 30 años, en una comida entre amigos en un restaurante del bulevar Aeropuerto: la plática de sobremesa versaba sobre la necesidad de contar en Guanajuato con un banco regional que respaldara a la pequeña y mediana industria local. Aquello que parecía un sueño, casi una idea peregrina, se convirtió en una misión clara: hacer realidad ese sueño.
Soñar es el punto de partida de toda gran hazaña. Es en el terreno de las ideas y aspiraciones donde germinan los proyectos capaces de transformar vidas y sociedades. Sin embargo, convertir un sueño en realidad requiere algo más que inspiración: demanda visión estratégica y valentía para emprender y superar los obstáculos del camino hacia el éxito.
BanBajío nació en 1994, un año especialmente difícil para México. El país atravesaba la peor crisis económica y política de su historia reciente, conocida como el “Efecto Tequila”. La fuga de capitales y la falta de reservas desencadenaron la devaluación del peso, durante el sexenio del presidente Zedillo.
En este contexto, el joven BanBajío enfrentó desafíos colosales. Como un barco en medio de una tormenta, todos sus integrantes tuvieron que remar contra viento y marea para esquivar los arrecifes financieros y asegurar su supervivencia. Mientras otros bancos nacidos en esa época no lograron resistir, BanBajío destacó gracias a un ingrediente fundamental: Coraje, esa fuerza intangible que impulsa a seguir adelante, a persistir cuando otros renuncian y dicen “no”, BanBajío se atrevió a decir “sí”, esto fue clave en su travesía.
El 8 de junio de 2017 el banco dio un paso histórico al debutar en la Bolsa, con una oferta pública inicial de 9 mil millones de pesos. El precio de colocación fue de 29.50 pesos por acción, y antes del cierre sus acciones se consolidaban como las más negociadas y con mayor ganancia del día. Cabe destacar que BanBajío es la única institución originaria de Guanajuato que cotiza en Bolsa.
A partir de este memorable evento, el banco sería juzgado y considerado por los mercados, acorde a su transparencia, beneficios y rentabilidad. Pero, sin la menor duda, la confianza ha sido el premio que los mercados le otorgaron, para seguir avanzando por la vía del éxito.
La actividad bancaria no solo genera utilidades para los accionistas; también cumple una función social trascendental: promover el desarrollo económico, crear empleos, ofrecer oportunidades y financiar éticamente a quienes hacen crecer a México. BanBajío ha cumplido con esta misión durante 30 años, consolidándose como aliado estratégico para empresas y emprendedores.
Desde su creación, el banco ha seguido la visión de su presidente Salvador Oñate Ascencio: convertirse en una institución moderna, enfocada en atender las legítimas aspiraciones de empresas y ciudadanos, contribuyendo al desarrollo económico del país y al bienestar común. Este enfoque, ha sido un motor de la creación de empleos y el crecimiento de nuevas empresas.
Consciente de los cambios generacionales, el Consejo de Administración acordó el nombramiento de Salvador Oñate Barrón como nuevo presidente, quien asumió el reto de liderar al banco hacia el futuro, en relevo de su padre. Chavarín, como le dicen con afecto sus amigos, es un joven empresario carismático, bien preparado, titulado en Contabilidad y finanzas por el ITESM; además, es inmune al virus del hybris, que usualmente enferma a los que no soportan el poder y el éxito. Así mismo, cambió la dirección general, de Carlos de la Cerda quien supo darle lustre al Banco, y pasó a manos de Edgardo del Rincón, un economista, banquero talentoso y experimentado, una persona amable, con don de gente, cuya gestión ha logrado resultados históricos.
BanBajío es un actor importante en el sistema financiero de México. Inició con un capital contable de 120 millones, para llegar en septiembre del 2024 a 43 mil millones. Su misión contempla un horizonte de miras altas y, para avanzar, cuenta con intangibles invaluables, como la confianza de los ciudadanos, prestigio, y excelente capital humano; tiene 321 sucursales, su cartera de crédito suma 254,571 millones; tiene 1.2 millones los cuentahabientes y activos por 347 mil millones de pesos.
Al celebrar tres décadas de trayectoria, BanBajío reafirma su compromiso de seguir apoyando a quienes hacen crecer a México. ¡Felicidades, BanBajío!