Después de un reporte de disparos en un centro médico del Departamento de Militares Veteranos de Estados Unidos (VA) en Dayton, Ohio, la policía estaba revisando el interior del complejo.
Los empleados en la clínica de VA en Dayton dijeron a los medios de comunicación que por lo menos una parte del complejo permanecía cerrada el lunes a excepción de la policía. Imágenes de la televisora WDTN mostraba a empleados saliendo del centro, mientras ingresaban agentes del FBI.
En su página de Facebook, la clínica se limitó a informar que las citas programadas estaban suspendidas hasta nuevo aviso. Explicó que eso obedecía a “una situación en desarrollo”.

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