Hasta el momento autoridades sanitarias no han detectado casos de clembuterol en el Rastro de Salamanca.
Los inspectores al interior del rastro detectan tanto el comportamiento del animal antes de ser sacrificado y revisan los tejidos o hígados, para tomarles muestras en el caso de que sean sospechosos.
La última revisión realizada por la Comisión Federal de Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), fue en el mes de abril cuando el personal de la dependencia tomó varias muestras que resultaron negativas a esta sustancia.
Rubén Escobar Candelas, director del Rastro, informó que existen otras medidas adoptadas por el personal para detectar algún posible caso de res con clembuterol.
Existe un área a la que son destinados animales sospechosos, desde un principio el médico veterinario observa el comportamiento de los bovinos.
A los que detecta diferentes a los demás los separa, en otros casos durante la revisión de las reses sacrificadas observa los tejidos, los órganos en este caso el hígado y si los nota raro los aparta al igual que la carne que ya no es comercializada.
Envía las muestras a laboratorio que determinará si era carne contaminada o estaba limpia.
“Salamanca se distingue por eso los introductores traen animales limpios”.
Además la Secretaría de Salud de Guanajuato giró varias recomendaciones a este Rastro para evitar problemas.
como el acercamiento con la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa), para incorporar programas para la certificación de introductores libres de clembuterol; también el de no descuidar la infraestructura y al personal.
Explicó que debido a problemas registrados en otros municipios la matanza ha incrementado.
De 130 reses sacrificadas diariamente pasó a 200 y en cerdos de 180 pasó a 240, porque introductores de otras localidades vienen al de Salamanca.