Solamente una hora duró la fila, los tumultos, la reventa y la venta de espacios en la taquilla del Estadio León, en el primer día de venta libre.
Los revendedores tuvieron muy poca oportunidad de sacar algún beneficio, viéndose impedidos por la fluidez con la cual se vendían las entradas y por los elementos de seguridad que se encargaron con atino de preservar el orden.
La mecánica era vender cuatro boletos por aficionado y comenzó a formarse la gente desde el martes por la tarde, con algunos que temían se acabaran rápidamente los ingresos.
León amaneció con una extensa fila de que abarcaba desde las taquillas hasta la taquilla de la feria, que se agrandó aún más cuando se acercaban las 10 de la mañana.
Las taquillas abrieron puntualmente a las 10 de la mañana y a partir de ese momento la gente formada comenzó a avanzar, en total fueron ocho las ventanillas que estuvieron funcionando.
Alrededor de las 11:30 de la mañana desapareció la “cola” y la gente que iba llegando no tenía que esperar más de cinco minutos para adquirir sus pases.
Los aficionados prometen llenar el Estadio León este jueves, donde esperan que los verdes puedan sacar una ventaha importante que les permita manejar la serie y acceder a la gran final del futbol mexicano.
Fluye venta y taquillas
Solamente una hora duró la fila, los tumultos, la reventa y la venta de espacios en la taquilla del Estadio León, en el primer día de venta libre.