Eugenio Derbez, Demian Bichir, Diego Luna, Daniel Giménez Cacho y Kuno Becker siempre han recibido las órdenes de un director para que sus actuaciones sean perfectas. Ahora, los papeles se han invertido, pues han decidido contar sus propias historias.
Recupera la pasión
César Chávez fue dirigida por Diego Luna y basada en la historia del líder campesino que luchó por los derechos de los trabajadores en Estados Unidos.
A pesar de que Diego suma ya cuatro cintas como realizador, J.C. Chávez, inspirada en el boxeador mexicano; Abel y Revolución, dice que aún le falta mucho camino por recorrer.
“No me siento un experto porque como director, tengo mucho que aprender. Sé que tengo la pasión, el hambre y la necesidad por contar historias que me preocupan, especialmente de temas que me interesan”, señala el actor de 34 años.
“Dirigir me ha devuelto la pasión de actuar, algo que ya no sentía del todo y estar detrás de la cámara me está devolviendo una pasión por lo que hago”.
Un ‘milagrazo’ lo hace director
Aunque reconoce que todavía le falta mucho por aprender, Daniel Giménez Cacho aceptó el reto de debutar como director en la serie Crónica de Castas, que se transmite por Canal Once.
“Puedo ir ampliando mi conocimiento sobre el oficio. Dirigiendo se aprende mucho de cómo hay que actuar”, comenta el actor de cintas como Arráncame La Vida y Colosio: El Asesinato.
“¡Por güey! (no había dirigido). Siempre lo estaba pensando ‘lo tengo que hacer, lo tengo que hacer’, pero las cosas si no te sientas a procurarlas, no suceden, aquí aparentemente fue un milagrazo”.
A los 50 hace su debut
Lograr una prestigiosa carrera como actor, primero en México y después en Estados Unidos, no fue suficiente para Demian Bichir, por eso el año pasado, justo cuando cumplió 50 años de vida, filmó su ópera prima Refugio, que está en postproducción.
“No lo planeé así, es una coincidencia en cuanto a fechas y números”, dice el nominado al Óscar como Mejor Actor por la cinta A Better Life (Una Vida Mejor).
“Es un proyecto que tiene un rato tratándose de levantar y como todo en el cine, cuesta mucho trabajo realizarse”.
Dirigir le da pánico
En los planes de Eugenio Derbez no estaba la idea de dirigir una película, pero sí de actuar.
Como no recibía el proyecto que a él le interesaba, se dio a la tarea de escribir su propio guión y con ello llegó también la oportunidad de debutar detrás de cámaras en No Se Aceptan Devoluciones.
“Cuando empecé a trabajar en la película no pensaba dirigir porque iba a ser demasiado actuar al mismo tiempo, pero después de mucho pensarlo me convencí que la única manera de que yo lograra transmitir lo que quería sin que cambiaran lo que había propuesto era dirigiéndolo yo mismo”, expresa el comediante.
“Me moría de miedo, me dio pánico el primer día que llegué al set, pero a los dos días me sentí como pez en el agua”, dijo sobre la cinta que ha roto récords de taquilla en México.
Sólo quiere entretener
Su afán de entretener como actor le abrió el camino a Kuno Becker para dirigir sus propia película 5 Bravo, un thriller en el que también actuó.
“Lo que son las cosas de la vida; cuando inicié mi carrera como actor nunca soñé ni pensé en ser director, me senté en esa silla porque me hice trabajando en este medio. En el set aprendí a diferenciar todas la cosas técnicas”, expresa Kuno.
“Mi inquietud como artista no me dejaba en paz, yo quería proponer una historia y el vehículo era dirigiendo. Mi único interés por hacer películas es llevar entretenimiento al espectador, mantenerlo en suspenso y saltando de la butaca”.