El gobierno federal demandó a Lance Armstrong aduciendo que el ciclista violó su contrato con el Servicio Postal estadounidense y se “enriqueció injustamente” al doparse para ganar siete veces el Tour de Francia.
El Departamento de Justicia reveló el martes su medida. Ya había anunciado previamente que se sumaría a una demanda presentada por un ex compañero de equipo de Armstrong, Floyd Landis, y el martes vencía el plazo para presentar la demanda.
El Servicio Postal (USPS) pagó unos 40 millones de dólares para patrocinar los equipos de Armstrong en seis de sus siete victorias en la carrera más importante del ciclismo mundial. La demanda presentada ante un tribunal de Washington DC dice que el servicio pagó a Armstrong 17 millones de dólares de 1998 al 2004.
La demanda también designa como acusados al ex director del equipo de Armstrong, Johan Bruyneel, y la empresa Tailwind Sports.
“Los acusados se enriquecieron injustamente con los pagos y otros beneficios que recibieron del USPS, directa o indirectamente”, dice la demanda.
Los costos financieros para Armstrong y Bruyneel podrían ser elevados. Armstrong ha sido abandonado por sus patrocinadores personales y dejó la fundación para la lucha contra el cáncer que inició en 1997.
Armstrong había tratado de negociar un arreglo, pero esas conversaciones se cortaron antes de que el gobierno anunciara que se sumaría a la demanda de Landis. Las conversaciones sobre un posible arreglo podrían reanudarse a medida que el caso avanza hacia un juicio.
Armstrong, quien en enero admitió haber usado drogas estimulantes después de negarlo durante años, sostuvo que el patrocinio del Servicio Postal a su equipo benefició a esa agencia del gobierno mucho más de lo que le pagaron a él.
El abogado de Armstrong, Elliot Peters, calificó la demanda del gobierno de “oportunista”.
“El Servicio Postal se benefició tremendamente por su patrocinio del equipo de ciclismo. Sus propios estudios lo demuestran reiterada y concluyentemente”, afirmó Peters. “El USPS nunca fue víctima de fraude. Lance Armstrong dio a la marca una tremenda exposición durante los años de patrocinio”.
El gobierno deberá demostrar no solamente que el Servicio Postal fue defraudado, sino también que sufrió perjuicios.
Estudios previos efectuados para el Servicio Postal concluyeron que la agencia se benefició por lo menos en 139 millones de dólares por su exposición mundial en cuatro años.
El abogado de Landis, Paul Scott, desestimó la idea de que el dinero ganado por el Servicio Postal bastaba para negar la denuncia de fraude. Afirmó que el Servicio Postal quedó dañado por el escándalo de drogas.