Algunas Afores compiten poco por rendimiento para atraer nuevos clientes.
Según estadísticas de la Comisión Nacional de Ahorro para el Retiro (Consar) a junio, la diferencia entre el rendimiento más alto y el más bajo que ofrecen las Afores llegó a nueve puntos porcentuales.
Esto puede significar una gran diferencia en las pensiones que recibirán los trabajadores que tengan sus recursos en alguna de estas empresas.
De acuerdo con la calculadora de la Consar, un punto porcentual de diferencia en el rendimiento, puede significar una pensión hasta 30 por ciento mayor.
Las estrategias de inversión de cada administradora son tan diferenciadas que mientras el rendimiento neto que ofreció la Afore Inbursa a su millón de afiliados fue 4.72 por ciento en los últimos doce meses, Sura dio sus 6.2 millones de clientes, 13.73 por ciento.
Los trabajadores reciben cada mes en su estado de cuenta, el rendimiento neto anual de los últimos cinco años (60 meses) de la Sociedad de Inversión (Siefore) que les corresponde según su edad.
Si se analiza por Siefore, también el diferencial de rendimientos es muy amplio.
En la Siefore 4, que agrupa a los asalariados con menos de 36 años, el promedio simple de las 11 Afores del sistema es 9.85 por ciento anual para los últimos cinco años.
Pero Sura y Banamex están en 12.06 y 11.25 por ciento, respectivamente, mientras que Inbursa se ubica en 6.21 por ciento.
La información pública permite verificar muy poco cuál es la estrategia de inversión que sigue cada empresa, ya que casi todas tienen la misma proporción de recursos en renta variable o deuda gubernamental.
Hasta el momento se desconoce cuánto están apostando a instrumentos de corto o largo plazo.
Héctor Valencia, socio de la consultoría financiera Valmor, comentó que los trabajadores eligen Afore por comisión y no están consientes de cómo un mayor rendimiento hará la diferencia en su pensión,
“En la medida en que los trabajadores se vayan jubilando y lo observen, tomarán mayor conciencia del rendimiento como herramienta para elegir”, aseveró.
Agregó que las Afores saben que la mayoría de los trabajadores aún no eligen por mayor rendimiento, por lo que estas administradores se preocupan menos por ofrecer altas ganancias y muestran más interés por ofrecer una comisión baja.
“No obstante, la Consar debe ser el árbitro y obligar a las Afore a ser competitivas, ya que si la contribución a las cuentas y los rendimientos son bajos, la perspectiva de pensión no es favorable”, aseveró.