En una carrera contra el tiempo, integrantes de una organización japonesa están examinando los archivos de un museo militar de la Segunda Guerra Mundial que está en Nueva York con la esperanza de hallar las tumbas de soldados estadounidenses que murieron en la batalla de Saipán.
La prisa se debe a que a finales de año una empresa comenzará a construir un condominio cerca de la playa donde decenas de estadounidenses murieron el 7 de julio de 1944, en el mayor ataque suicida de Japón ocurrido durante la guerra.
La organización japonesa no lucrativa Kuentai-USA, que busca a los muertos en guerras, encontró los restos de al menos dos soldados estadounidenses cerca del sitio de la construcción en 2011 y 2013, y cree que hay por lo menos otros 16 sepultados cerca.
“Esto es urgente”, dijo Usan Kurata, fundador de la organización. El periodista de 58 años visitó esta semana un museo militar que está en Nueva York junto con una colaboradora, ambos son de Kioto. Kurata dijo que la organización cree que es lo correcto regresar a sus familias los restos de los soldados fallecidos.
La agencia del Pentágono encargada de indagar sobre las muertes de soldados estadounidenses en campos de batalla en el extranjero dice que unos 20 militares siguen desaparecidos en Saipán, parte de las Islas Marianas del Norte, un territorio estadounidense a 2,250 kilómetros de Japón.
El mayor Jamie Dobson, portavoz del mando conjunto de prisioneros de guerra y caídos en acción de Estados Unidos, dijo que las empresas del proyecto deben cumplir con las estrictas leyes de preservación histórica de Saipán y si hay posibilidad de que esté en riesgo el sitio de las sepulturas, Estados Unidos mandaría a un equipo de recuperación.
Más de 3,000 soldados japoneses lanzaron el asalto donde resultaron muertos o heridos al menos 900 soldados estadounidenses. Muchos de los caídos en el ataque “banzai” eran del estado de Nueva York.

Leave a comment

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *