Reese Witherspoon habló por primera vez del arresto que sufrió en Atlanta, junto con su esposo, el mes pasado, y mencionó que, entre otras cosas, le dijo al agente que efectuó la detención que estaba embarazada.
La actriz relató su experiencia la mañana de este jueves en el programa Good Morning America, en el que reconoció que ella y su esposo cometieron un error al beber de más y conducir.
“Es totalmente inaceptable, y estamos muy apenados.
“Salimos a cenar en Atlanta y bebimos demasiadas copas de vino. Pensamos que estábamos bien para conducir, pero no lo estábamos. No debimos haberlo hecho”, expresó.
El arresto de su esposo, Jim Toth, causó un ataque de pánico a la estrella de Agua para Elefantes, por lo que comenzó a decir cosas sin sentido y a ofender al agente.
“Vi (al policía) arrestando a mi esposo y literalmente entré en pánico. Le dije que estaba embarazada. No estoy embarazada, pero dije todo tipo de cosas locas.
“Fui muy irrespetuosa con él. Tengo policías en mi familia, trabajo con policías todos los días. Ahora sé que fue simplemente inaceptable”, reconoció.
Witherspoon, quien dio vida a una estudiante de leyes en Legalmente Rubia, filme que la lanzó a la fama, dijo que aprendió que las órdenes de una autoridad son inexorables.
“Interpreté a una abogada tantas veces en películas, que ahora pienso que soy una abogada. Y claramente no soy abogada, porque fui arrestada. Cuando un policía te dice que permanezcas en el auto, debes permanecer en el auto”, dijo.
La actriz contó que la parte más complicada del asunto ha sido explicarle a sus hijos acerca del arresto.
“Tenemos que decirles que cuando cometes un error, debes tomar la responsabilidad. Nosotros estamos tomando la responsabilidad y estamos haciendo todo lo que está en nuestro poder para hacerlo correctamente”, dijo la ganadora del Óscar.

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