Las quince toneladas de víveres reunidos en el centro de acopio de Cruz Roja fueron enviadas a Chilpancingo, Guerrero, a la zona de la sierra, que es de los lugares más afectados por las inundaciones del doble efecto los ciclones “Manuel” e “Ingrid”.
Misión cumplida, en primera etapa dice Cruz Roja, en agradecimiento a la suma de reinas de la ciudad, cooperativas o cajas de ahorro, escuelas, empresarios, abarroteras, población en general y todos los que contribuyeron para alcanzar el primer envío, pues el centro de acopio sigue abierto en las dos instalaciones de Cruz Roja, en tanto no se dé otra indicación, y es que aún hay muchas zonas que requieren apoyo.
Cruz Roja agradeció incluso el respaldo de Protección Civil porque se logró reunir un equipo de 100 a 120 voluntarios que apoyaron en clasificar y hacer los paquetes y agrupar en cajas a modo de despensa para que lleguen a las manos de quienes lo requieren.
Diego Barrarán, coordinador de área local de socorros de Cruz Roja, refirió que la tarde de ayer, después de estar en el banderazo de salida de los víveres a sus lugares de destino, ante el gobernador Miguel Márquez Márquez en el Parque Bicentenario, quedó de manifiesto que sigue el compromiso, la labor no ha concluido, y es el mismo mensaje que replicó al equipo de voluntarios Ma. Teresa Aceves Felipe, presidenta de Cruz Roja San Francisco al personal administrativo, como de voluntarios para seguir en la promoción ante la ciudadanía.
Un grupo de 120 voluntarios de Cruz Roja local, así como el equipo administrativo, acudieron a Silao a realizar la entrega de las 15 toneladas de víveres, que aunque la capacidad del tráiler es mayor, la realidad es que debía empaquetarse y cargarse todo lo necesario dando suficiente espacio para no dañar la carga y que no lleguen afectados los víveres a sus destinatariose en Guerrero.
Se estima que el cargamento tardará en llegar de 12 a 14 horas a Chilpancingo Guerrero, en el tráiler en el que viajan a su vez dos personas o voluntarios de la delegación de Cruz Roja, y corroborar que los víveres lleguen a sus destinatarios, ellos son Joaquín Segura e Ignacio Hernández.
Todo lo que fue requerido en víveres llegó aún más en atún, frijol, calzado incluso que fue aceptado, aceite, pañal, papel de baño, escobas, cubetas, champú, toallas femeninas y todo cuanto se pidió en la lista.
Las zonas para donde aún se requiere respaldo y por los que se sigue pidiendo víveres son Veracruz, Tamaulipas, Sinaloa y el propio Guerrero.
La caravana que salió la mañana de ayer de San Francisco fue a las 10 de la mañana rumbo al Parque Bicentenario, abriendo paso la unidad 08 de Rescate Urbano de Cruz Roja, el tráiler con el cargamento y luego el camión de pasajeros con 120 voluntarios de las áreas de capacitación, juventud y socorros.

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