Casi por cumplir 60 años, Keishi Egawa se dispone a alcanzar uno de los retos más grandes de su vida: construir, arrancar y operar la planta de Mazda en Salamanca, Guanajuato.
Esta fábrica significó para Guanajuato tres años de competencia, subió al ring mundial peleando contra Estados Unidos y Brasil.
“Es el proyecto más importante para Mazda en el mundo”, dijo Keishi en entrevista con AM.
Mazda en Guanajuato es la primera en América. Actualmente emplea a 2 mil trabajadores entre ellos a 200 japoneses.
En 2016 contará con 4,500 trabajadores más 3 mil empleados de las fábricas proveedoras.
Serán otros 1,500 empleos cuando le produzca a Toyota.
El CEO (director ejecutivo) de Mazda Salamanca, economista de profesión, Keishi Egawa, está enamorado del proyecto.
“Planeamos cubrir los mercados de Estados Unidos, México y también Sudamérica”.
En el primer trimestre de 2014, Mazda Guanajuato inicia la fabricación de autos con el modelo Mazda 3, “ahora estamos entrenando al personal”.
Planean la fabricación de 180 mil unidades anuales Mazda y 50 mil Toyota.
El viernes pasado, Keishi, vestido de pantalón color rosa y saco gris, sorprendió en el Aeropuerto del Bajío al grupo que acompaña al gobernador Miguel Márquez en su visita a Japón.
Keishi viajó a Hiroshima para recibir personalmente a Miguel Márquez en la sede mundial de Mazda.
Hiroshima es una ciudad ubicada al este de Japón. No llega a 2.5 millones de habitantes pero su fuerza económica es superior a la del estado de Guanajuato, explicó Juan Manuel Fernández Ruiz, quien junto con el secretario de Fomento Económico, Héctor López Santillana, fue un actor fundamental en las negociaciones para que Mazda se ubicara en Salamanca.
“Fueron 18 meses de tensión, de encuentros, de entrevistas”.
Para Keishi, el proyecto ha sido muy emocionante. Llegó a Guanajuato en septiembre del año pasado y parece feliz.
Rápidamente se integró a la vida de los guanajuatenses junto con sus compatriotas.
A la fecha, unos 40 de ellos ya tienen a sus familias en Salamanca. Los niños asisten a clases en el Liceo Japonés del cual Keishi es el presidente. La institución cuenta con 49 niños en todos los niveles.
Del ‘ahorita’… al just in time
Hace 35 años, Keishi Egawa ingresó a Mazda al área de contabilidad. Su carrera fue ascendente gracias a su capacidad y liderazgo.
“Es muy cercano a los trabajadores”, dijo la diputada federal Beatriz Yamamoto, presidenta de la Comisión de Amistad México-Japón, quien forma parte del grupo oficial que visita Japón.
Keishi come todos los días en Mazda, “el mismo menú de los 2 mil empleados; para japoneses y mexicanos es igual, no hay diferencias”.
Cuando descansa, el CEO de Mazda se divierte jugando golf, “el 90% de mi tiempo lo paso en el golf”, comenta divertido.
Los japoneses se divierten y acuden a los mismos sitios que los mexicanos, “vamos a los mismos lugares a comprar”.
Y ¿qué opina Keishi de los trabajadores mexicanos?, preguntó AM.
Con una amplia sonrisa, el economista respondió: “Son amistosos, jóvenes deseosos de aprender, los estamos entrenando”.
Al hablar de la puntualidad de los obreros, dijo con seriedad, “los estamos entrenando”.
Minutos después, Héctor López narró una anécdota.
“Un día, Keishi me llamó para preguntarme el significado de ahorita”.
Y es que para la industria automotriz, el principio es “Justo a tiempo” (just in time), precisó López Santillana.
“Si un obrero llega un minuto tarde, se para la línea de producción”.