Tras el retiro de árboles invadidos por plaga de gusano descortezador, autoridades municipales de Tulancingo exhortaron a la población a no llevarse los troncos, al notar que algunos de estos habían sido sustraídos del sitio donde fueron dejados el pasado fin de semana.
Por medio de un comunicado oficial, señalaron que además de ser un delito, llevarse los troncos representa un riesgo para la salud de las personas que los tomaron y quienes tengan contacto con ellas.
Lo anterior debido a que los troncos fueron impregnados de un plaguicida contra el gusano descortezador y la potencia del químico puede ser nociva para la salud, incluso en forma grave para quienes tengan contacto directo con la sustancia.
La semana pasada se determinó el retiro de 29 árboles ubicados en las inmediaciones del auditorio Manuel Fernando Soto, en la colonia Nuevo Tulancingo, tras comprobar por parte de ingenieros forestales que estaban invadidos por la plaga.
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Dos árboles más fueron retirados por recomendación de Protección Civil municipal, al establecer que por sus condiciones representaban un riesgo para la población.
El pasado fin de semana se concretó el retiro de los árboles, cuyos troncos fueron dejados a un lado de las jardineras donde se encontraban, en tanto hacía efecto el plaguicida con el que fueron rociados.
Pero el pasado lunes 27 de junio, al hacer revisión del sitio, personal de Protección Civil y Medio Ambiente municipal advirtieron que faltaban algunos troncos, por lo que se emitió el aviso y advertencia para evitar que continuara esa acción.
Además, establecieron con vecinos y sus representantes vigilar que no se lleven más troncos, tanto por los riesgos a la salud que implica así como por ser actividad ilegal, ya que permanecerán en la zona mientras hace efecto el plaguicida.