AL MINISTRO Arturo Zaldívar ya le llaman “El Caníbal Judicial” porque en esta semana se almorzó un par de preceptos legales que tienen a los expertos entre sorprendidos y espantados. Y es que, de plano, se comió de un bocado la separación de poderes y la presunción de inocencia.
AL PRESENTAR su iniciativa de ley sobre feminicidios, se olvidó de que esa no es facultad de los ministros de la Suprema Corte. Tan es así que la presidenta del Senado, la ex ministra Olga Sánchez Cordero, fue muy cuidadosa al decir que la apadrinarán para su-mar-la a otras que ya existen. Porque de llegar a aprobarse tal cual, su legitimidad constitucional podría ser impugnada… y ni modo que el mismo ministro que la propuso decida sobre su validez.
POR OTRO LADO, la miniserie producida por la Suprema Corte, “Caníbal”, relata la historia de un asesino serial, pero hay un problema: el programa da por un hecho que cometió los crímenes, sin embargo, sólo está sentenciado por uno y los otros 19 siguen en proceso. Es decir, la serie que tanto presume Zaldívar ya declaró culpable a alguien que todavía está en juicio. ¿Y el debido proceso, apá?
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AL GRITO de “el que no se mueve no sale en la foto”, Mario Delgado echó a andar la maquinaria para seleccionar a la candidata o candidato de Morena al Estado de México. Desde el primer minuto de hoy y hasta la medianoche de mañana, serán los registros.
CUENTAN que en la contienda Higinio Martínez trae el beso del diab… perdón, trae el apoyo de Fuerza por México que encabeza Ricardo Robledo y que es un negocio más del sindicalista Pedro Haces. De ahí que algunos se preguntan si el texcocano Martínez seguirá siendo morenista cuando pierda la nominación. O si, por el contrario, se convertirá en el factor que divida el voto obradorista en el Edomex.
LA RELACIÓN de Higinio Martínez con la gente de Pedro Haces es tan evidente que la senadora Lucía Meza, esposa de Robledo, estuvo en su mitin realizado en la Arena Ciudad de México. ¡Ah, claro! Y también por el detallito de que la central obrera de Haces, la CATEM, habría dado mucho más que apoyo moral para la renta del carísimo local.
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NO ES por poner en duda la seriedad de nadie, pero… ¿alguien cree que realmente la 4T ahora sí en serio va en contra de Enrique Peña Nieto?
EN ESTOS tres años y medio, Andrés Manuel López Obrador ha dejado clarísimo que tiene un pacto de inmunidad (o de impunidad) con su antecesor. Aunque, claro, eso no significa que no pueda, cada vez que hay alguna crisis, usar su figura para tratar de desviar la atención del público en las gradas.
PORQUE así como ahora Pablo Gómez presume que lo tienen por posible uso de recursos de procedencia ilícita, antes lo acusaron de recibir sobornos de Odebrecht y hasta de ¡traición a la patria! Y Peña Nieto ni se despeinó.