Un mes antes de lo previsto, Mario Delgado, presidente de Morena, ordenó correr la serie de encuestas previstas para la definición de la candidatura del oficialismo para el Estado de México que, si no hay sorpresas de última hora, recaerá en Delfina Gómez, actual secretaria de Educación. El resultado será anunciado a inicios del mes próximo, con el riesgo de daños internos.
En el frente opositor, por su parte, el proceso no vive tampoco momentos de certidumbre. Las cabezas de la alianza PRI-PAN-PRD están ciertas de que carecen de una fórmula con garantía de triunfo, lo que se suma al desgaste que exhiben las dirigencias nacionales en las dos primeras agrupaciones. Ello ha impedido mayor claridad a la ruta de un abanderado común, que deberá decidirse entre las priístas Alejandra del Moral y Ana Lilia Herrera. Pero desde el PAN se deja correr a Enrique Vargas, con amplio despliegue de recursos.
Actores cercanos a Palacio se hallan desde hace semanas en una carrera contrarreloj para evitar impugnaciones por parte de otros aspirantes a la postulación de Morena, varios de los cuales exhiben mayor trayectoria y bases políticas que la maestra Gómez Álvarez dentro del movimiento que encabeza el presidente López Obrador. Se trata de Higinio Martínez, Horacio Duarte y Fernando Vilchis. Los reportes disponibles dan cuenta de que ella se ha mantenido virtualmente al margen de estas negociaciones.
Fuentes cercanas al proceso dijeron a este espacio que existen peligros de diversa naturaleza. El principal de ellos lo representa Fernando Vilchis, alcalde reelecto en el municipio de Ecatepec, con un peso clave en el padrón estatal de 12.5 millones de electores. De acuerdo con los testimonios recabados, está amagando con sumarse al bloque opositor, vía el PRI, llevándose en las alforjas una cuota importante de votos de ese poblado municipio.
Es diferente el caso de Higinio Martínez, fundador del llamado “Grupo Texcoco” que dio lugar a la fortaleza de la izquierda en la entidad, desde donde ha acompañado a López Obrador por 30 años. En esa corriente creció Horacio Duarte, actual director de Aduanas y, apenas en la última década, Delfina Gómez. Ella es la más conocida en las encuestas -será su segunda campaña por la gubernatura en seis años-, la menos diestra en la operación política y, sin duda, la más maleable por parte de Palacio.
Es probable que el revés presidencial al senador Martínez Miranda lleve a éste a una autoexclusión y a mostrar brazos caídos, lo que puede atraer un segundo frente de debilidad para Morena. Horacio Duarte, el otro aspirante fuerte, ha sido mencionado para dirigir la campaña, pero todo indica que, si bien no generará ninguna señal de rompimiento, preferirá seguir al frente de su actual posición y aguardar a lo que traiga el futuro.
Apuntes: Ernestina Godoy, fiscal de la Ciudad de México, consideró pertinente confirmar con el presidente López Obrador su aval para ir a fondo en el caso del controvertido abogado Jesús Hernández Alcocer, presunto asesino de su esposa en un restaurante capitalino. A casi un mes de los hechos, se atribuyen a dos personajes relevantes estar moviendo piezas para alejar el tema de la lupa pública: se trata de Ana Yadira Alarcón Márquez, consejera en la Judicatura en la ciudad, y Jorge González Tenorio, un influyente operador de Rafael Guerra, magistrado presidente del Tribunal Superior de Justicia. Existe un acta previa en la que la esposa asesinada denunció al ahora inculpado por amenazarla al colocarle una pistola en la cabeza. El asunto quedó archivado en un cajón gracias a una mano amiga en los tribunales.
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