Es cierto que en los últimos años la violencia a las mujeres se ha visibilizado mucho más por las redes sociales, las denuncias y la propagación de la información prácticamente en el momento de los hechos, debido a esto se han implementado sanciones específicas para delitos cometidos contra las mujeres, considerándolas como un grupo vulnerable.

Recordando al principio de la pandemia, cuando comenzó el encierro y todos buscaban una forma de subsistir desde sus hogares, con entregas a domicilio, ayudando para hacer la despensa a otras personas, y personalmente vi la disposición de muchos, el apoyo para que otros crecieran en sus nuevos emprendimientos, quedé sorprendida de que muchas personas que no se conocían, pero con el afán de ayudar a otros se compartían y se recomendaban y nadie criticaba a otros por la forma como empezaron otra actividad de su vida personal.

En las últimas semanas, leyendo las noticias, me pude percatar de dos conocidas que tengo en Facebook, a través de sus publicaciones juzgaban a la mujer de la nota, en la primera, comentaba la noticia del asesinato de la cantante Yrma Lydya de 21 años a manos de su esposo de 79 años en un restaurante de la Ciudad de México, juzgando en su publicación la decisión de la cantante de casarse con un señor de avanzada edad para conseguir el dinero fácil y ella arruinando su vida, porque siendo tan bonita no buscó a otra persona, esencialmente el sentido del comentario era que al final ella se lo buscó, pero nunca leyó o se enteró que a esta mujer que le arrebataron la vida, desde el mes de abril buscaba el divorcio por violencia en su matrimonio, simplemente juzgó por la edad y la apariencia física de una persona.

La segunda publicación que vi de mi otro contacto, era una nota sobre una pareja que se comprometió en un partido de futbol, pero la que le pidió matrimonio, fue la mujer al hombre, al que muchos dirían que es poco común, pero nada extraño, pues aquí el comentario fue que “que urgidas” deberían estar las mujeres para que ellas sean las que tomen la iniciativa para dar este paso, nuevamente con el comentario de que si al hombre no le nace, ella no tiene que estar en una relación con esa persona, me pareció algo horrible llamar o generalizar a mujeres que toman la iniciativa como “urgidas”, y más que otra mujer lo diga. Claro que todos tenemos nuestras opiniones, y las podemos expresar como ahora lo hago yo desde este medio, pero por todo lo que hemos estado viviendo, muchos crecimos con estereotipos, y aprendiendo desde la cuna a juzgar, pero debemos ser empáticos en todos los sentidos, nadie sabe la situación que pasa cada persona, respecto a esta pareja que se ha comprometido, nadie sabe la forma en la que se formó, la dinámica que tienen, y si ella decidió hacer eso en un partido de futbol, es porque ambos lo disfrutan y sabía que iba a ser un buen momento.

Los roles que tiene en la sociedad las mujeres han ido evolucionando, hace años, ni soñar que pudieran acudir a una escuela, recibir educación, ser independientes, tener una carrera, un trabajo, derecho a votar, todas esas han sido luchas de nuestras madres, abuelas y bisabuelas que quisieron que las futuras generaciones fueran independientes y tuvieran lo que tal vez ellas no pudieron, y sin ser juzgadas. Todas las personas viven situaciones diferentes a las nuestras, si no tenemos una pareja que nos dé lo que vemos que otras reciben, no tenemos porqué generalizar haciendo referencia a que eso está mal porque a nosotros no nos pasa, dejemos el rencor y el odio hacia una persona y aprendamos a ser más empáticos y disfrutar de nuestra vida.

A seguir cuidándonos de esta quinta ola que vine muy fuerte, tratemos de no juzgar de la forma más severa la situación de otras personas, ese tipo de odio a llevado a varias personas a cometer delitos contra otros, no seamos ejemplo de malos tratos para los más pequeños, que apenas se están formando, les mando un fuerte abrazo y sigamos usando el cubrebocas. Hasta la próxima.

santiagoobregon.o@gmail.com

ACLARACIÓN       
La opinión expresada en esta columna es responsabilidad de su autor (a) y no necesariamente representa la postura de AM Hidalgo

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