Qué hacemos con Accendo

El coordinador de los diputados del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en el Congreso de Hidalgo, Julio Valera, tiene experiencia en la evasión, vamos, en negar la realidad que percibimos los ciudadanos comunes y corrientes. Y prueba de ello son tres sencillas anécdotas.

Primero, cuando propició en la legislatura pasada que simpatizantes tomaran la tribuna del Congreso local para evitar que los legisladores de Morena, los llamados “dipuporros” ligados al grupo universidad asumieran la junta de gobierno, de lo cual quedó constancia en la transmisión en vivo del sistema de Radio y Televisión de Hidalgo de aquella caótica sesión; situación que el diputado después negó.

Segundo acto. Las constantes declaraciones de que el priismo de Hidalgo salió fortalecido de pasados procesos electorales y que incluso fue el que obtuvo más votos en comparación con otros estados el país, cuando lo cierto es que el PRI dejará palacio de gobierno y a partir de septiembre deberá tomar clases intensivas para desempeñar su papel de oposición al Poder Ejecutivo, tanto estatal y federal. 

Tercer paso y el más reciente: cuando Julio Valera declaró en tribuna del Congreso local que fue la Secretaría de Hacienda federal la que decidió depositar recursos de un fondo en el banco Accendo, el cual se encuentra en proceso de quiebra señalado por posible administración fraudulenta.

“Hay una serie de bancos que están validados por el gobierno federal para que las entidades puedan escoger en donde, y hubo 16 entidades de todos los colores, del PRI, PAN, PRD, de Morena, que decidieron que se depositara ahí, pero lo más importante un gobierno federal de Morena que tiene el control de los mecanismos como la Comisión Nacional Bancaria y de Valores que decidió depositarlo ahí porque había las posibilidades y los requisitos. El banco tuvo problemas y hay 16 entidades que tienen problemas, que se llegue al fondo del tema pero que la gente sepa la verdad, que no la utilicen, que sean castigados los culpables ”, dijo el legislador.  

Ahora el próximo gobierno de Hidalgo deberá esperar para ver, aún no es un hecho, si se concreta el reintegro de los 807 millones de pesos transferidos en dicho banco.

Mientras que los grupos parlamentarios de Morena, Nueva Alianza, Partido del Trabajo y Verde Ecologista quieren citar a comparecer a la secretaria de Finanzas, Jessica Blancas, antes de que concluya funciones, y dar acuse a la Secretaría de la Función Pública y a la Auditoría Superior de la Federación (ASF) para que investigue un supuesto desvío.

Todo muy bien, pero la postura de Julio Valera, hay que decirlo en honor a la precisión, busca evadir la responsabilidad de la actual administración del gobierno de Hidalgo en el depósito de los recursos del Fondo de Aportaciones para la Infraestructura Social (FAIS) en Accendo.

De acuerdo con fuentes al interior del Congreso de Hidalgo, el diputado Julio Valera pretende involucrar a la federación en atribuciones que solo le competen al actual gobierno estatal, el cual eligió libremente esa institución financiera y es muy probable que deberá reintegrar los 807 millones de pesos a la tesorería federal más los rendimientos.

Y eso, si es una grosería por decir lo menos en un estado donde la mayoría de su población vive en pobreza extrema y carece de los recursos mínimos para adquirir la canasta básica con la finalidad de cubrir sus necesidades alimenticias.

Es cierto que el próximo gobierno, cuya promesa de campaña es acabar con la corrupción, no puede permitirse adquirir un obligación de 807 millones de pesos, ni mucho menos solapar a los funcionarios que incurrieron en probables irregularidades. La nueva administración estatal al preguntarse qué hacemos con Accendo está por tomar la primera decisión importante que le confiere el ejercicio del poder.

Por cierto, que alguien despierte a los magistrados del Tribunal Electoral de Hidalgo (TEH), quienes al parecer se quedaron dormidos y no se dieron cuenta que el Instituto Nacional Electoral (INE) ya descartó el rebase en el tope de gastos de campaña en la elección del pasado 5 de junio, por lo que la impugnación de Carolina Viggiano, la cual busca anular las votaciones, no prosperará y solo es cuestión de tiempo para que Julio Menchaca asuma funciones en septiembre.