Mientras entrenaba para su próximo encuentro con balón en aire junto a una compañera, la capitana Nery Méndez Navarro suspendió por un momento su labor de preparación para comentar su experiencia en esta competencia.
Una adrenalina sin igual
Con el balón abrazado a su estómago, Nery comenzó a expresar su sentimiento a la hora de jugar al voleibol, disciplina que practica desde los nueve años.
“Siempre sientes mucha adrenalina y conforme vas avanzando, mejoras tu nivel de juego. Eso sí, tenemos que tener una buena comunicación para mejorar nuestra participación”.
No es su primera vez en este tipo de eventos, pues ellas ya tienen un largo recorrido en esta disciplina.
“Nosotras participamos año con año y ya llevamos seis competencias nacionales. Lo que hemos visto es que existe una organización muy buena y eso es excelente”.
A pesar de haber hecho 12 horas de viaje hasta la ciudad leonesa, el cansancio no importa.
“Sí es pesado, pero no importa por esta pasión inmensa que tenemos por el voleibol”.
El voleibol, una vía para hacer deporte
Trabajadora en Petróleos Mexicanos (PEMEX) en su ciudad natal, Nery comenta que es primordial para ellos continuar con el deporte en distintas competencias como una vía para mantenerse sanas.
“Hemos participado en distintas competencias como los Juegos Nacionales en Minatitlán. Eso mejora nuestra convivencia demasiado y nos impulsa a crear nuevas amistades, lo cual es importante”.
Por esta razón, desea que esta disciplina perdure en su vida por mucho tiempo más.
“Seguiré jugando hasta que el cuerpo aguante porque pienso que, para este deporte, no existe la edad, sino las ganas por jugarlo”.
En este tercer día de actividades y con una competencia inmensa, las Joyas de Minatitlán esperan avanzar de ronda, para seguir experimentando de una aventura a más de 900 kilómetros lejos de casa.