Irapuato, Guanajuato.- Durante tres horas, a manera de protesta, 250 personas bloquearon con piedras ambos sentidos de la circulación vehicular de la carretera federal 45, en el tramo Irapuato-Silao, a la altura de la comunidad Ampliación Lo de Juárez, al norte de Irapuato, a seis kilómetros de la cabecera municipal.
Después de que con el uso de la fuerza pública y sin ninguna orden de desalojo, 406 familias fueron desalojadas de sus viviendas para derribarlas con maquinaria pesada, tras construirlas como asentamiento irregular, a un costado de la carretera.
Las afectadas serían 406 personas, pero el bloqueo provocó caos vial, al detener totalmente el tránsito vehicular.
Desde diciembre, alrededor de 110 familias decidieron usar tarimas, madera, plástico y cartón para construir su vivienda dentro de un terreno irregular de 14 hectáreas, con el nombre de Ampliación Lo de Juárez.
Hoy, alrededor de las 6 de la mañana, hombres, mujeres, niños y personas de la tercera edad, sorpresivamente fueron despertados y desalojados con el uso de la fuerza pública por parte de la Policía Municipal y con la ayuda de retroexcavadoras.
“Me dice un vecino que comenzaron a llegar como a las cinco de la mañana, que a lo lejos por el camino de terracería a Lo de Juárez, se veían las luces y las patrullas para entrar. A las 6 (de la mañana) gente con chalecos amarillos, sin identificarse, pasaron de casa en casa, tocando las puertas con mucha violencia.
“Nos gritaban: ¡salgan de sus casas!, ¡es una orden!, pero nunca dijeron por qué, ni nada, ni presentaron ningún documento, ni una orden de desalojo; entró la maquinaria y comenzó a tirar todo. Yo desperté a mis dos hijas, y como pude salí corriendo con ellas”, demandó Teresa, madre soltera.
Los afectados se organizaron y mientras tiraban sus humildes viviendas, se manifestaban en ambos sentidos de la circulación de la carretera Irapuato-Silao.
Colocaron piedras en los carriles, y con pancartas y banderas blancas hechas de palos de escobas y tela blanca, se manifestaron en medio del tránsito.
Generó un caos vehicular, al quedar filas de vehículos varados, de Silao hacia Irapuato hasta la comunidad Los Nicolases y hacia Silao hasta los entronques de los libramientos norte y sur.
Gritaban: “¡Queremos nuestras casas!”, “¡Queremos nuestras casas!”, “¡Queremos nuestras casas!”, además de pancartas que decían: “Toda familia tenemos derecho a disfrutar de una vivienda”, “El artículo 4 de la constitución establece que tenemos derecho a una vivienda digna” y “Derecho a un pedacito de patria”.
Para buscar a través del diálogo quitar el bloqueo llegaron el Secretario del Ayuntamiento de Irapuato, Rodolfo Gómez Cervantes y el Secretario de Seguridad Ciudadana, Ricardo Benavides Hernández, pero no lo lograron.
Sin embargo, tres horas después llegó la fuerza pública con alrededor de 150 elementos del grupo antimotín de las Fuerzas de Seguridad Pública del Estado y Policía Municipal para retirar con el uso de la fuerza pública el bloqueo y permitir el libre tránsito.
“¡No queremos violencia!”, “¡no queremos violencia!”, “¡no queremos violencia!”, gritaban los manifestantes, mientras se hincaban entre los carriles de circulación para no ser retirados, pero entre empujones, jalones y golpes, mujeres y niños fueron quitados a la orilla de la carretera.
La circulación en ambos carriles regresó a la normalidad, mientras permanecía a un costado de la carretera el grupo antimotín.
En tanto en los terrenos seguían tirando las viviendas con la maquinaria pesada, al mismo tiempo que las familias afectadas buscaban sacar sus camas, muebles, herramienta y pertenencias de valor de sus casas, antes de derribarlas. Otros desmontaron las tarimas con que construyeron y se las llevaron en camionetas, autos y triciclos.
AM