Si a usted no le importan los partidos políticos, usted menos les importa a ellos. Nuestros Partidos Políticos ya están viejos, los de segunda generación tienen 45 años cobrando en la nómina desde 1977. La vejez y la comodidad les alcanzó.
Hoy le mostraré algunos datos de partidos que se han inyectado Botox como el Partido Verde y Movimiento Ciudadano, ni uno es verde, ni el otro es ciudadano. Pero eso sería un debate poco menos que útil, los números son los que cuentan, sobre todo en Guanajuato y en nuestros municipios.
Cuando inició la Reforma Política en 1977, impulsada por el Secretario de Gobernación, Don Jesús Reyes Heroles, el Gobernador de Guanajuato Humberto Ducoing Gamba, ya tenía 4 años de haber iniciado su mandato, precisamente, el 25 de septiembre de 1973, 14 días después de haber ocurrido el siniestro golpe de estado en Chile.
Dos años después, en 1979, por primera vez 5 partidos políticos conforman un nuevo escenario electoral en el estado de Guanajuato: el PRI, PAN, PARM, PPS y PDM. El PRI lleva a la cabeza a Enrique Velasco Ibarra, y gana con 330,200 votos en coalición con el PPS, y el PARM (83.3%); el PAN participa en coalición con el PDM, su candidato es Juan Manuel López Sanabria, juntos obtienen 49,525 votos (12.5%). Es importante, tomar nota de las coaliciones, y número de votos porque eso explicará la desaparición de algunos partidos y su verdadero peso electoral.
En 1984 a la renuncia súbita de Velasco Ibarra, el Senador Agustín Téllez Cruces, asume la gubernatura, hasta el final del periodo (1985).
En la elección oficial para gobernador de 1985, aparecen 2 nuevos partidos el PST, y el PSUM. El PRI participa en Coalición con el PPS, y llevan como candidato a Rafael Corrales Ayala, quien gana con 396,325 votos (64.2%); el PAN va nuevamente con Juan Manuel López Sanabria, pero solo, y obtiene 116,927 votos (18.9%); el PDM participa con Ramón Torres Robles, y su votación es de 93,275 (15.1%); el PSUM obtiene 4,802 votos, y el PST 1,908 votos. Votan 617,630 ciudadanos, de un total de 1,535,839 electores registrados. En Celaya, participa Jorge Chaurand Arzate por el PRI, y gana la presidencia municipal.
En la elección de 1991, participa el PRI sin aliados, con Ramón Aguirre Velázquez, quien gana la elección con 626, 436 votos (53.1%); por el PAN, participa Vicente Fox Quezada, con una votación de 418, 324 votos (35.5%); le sigue el PARM con Juan Gabriel Torres Landa, quien obtiene 11,303 votos (1.0%); el PDM obtiene 31,551 votos (2.7%); y la Coalición Democrática Popular, entre el PRD –surgido en 1988-, y el PPS, obtienen 91,150 votos (7.7%), su candidato es de origen priista Porfirio Muñoz Ledo. Votan 1,178,764 ciudadanos de un padrón de 1,646,872.
Por decisión presidencial, de Carlos Salinas de Gortari, se acuerda la renuncia de Ramón Aguirre Velázquez debido a las acusaciones de fraude electoral, el PAN toma por primera vez en la historia de Guanajuato la gubernatura, pero no se le otorga al competidor Vicente Fox, si no a Carlos Medina Plascencia quien había sido Presidente municipal de León. Y asume el gobierno estatal, el 26 de septiembre de 1991. Este evento es conocido como la “concertaseción”.
En la elección de 1995, el PAN, otra vez con la candidatura de Vicente Fox, obtiene la gubernatura con 723,337 votos (58.1%); le sigue el PRI con Ignacio Vázquez Torres, quien obtiene 409,578 votos (32.9%); le sigue la alianza PRD-PPS con Malú Micher –actual aspirante a la gubernatura por Morena- quien obtiene 87,438 votos (7.0%); y aparece por primera vez el PT, postulando a Salvador Arévalo, quien obtiene 14,833 votos (1.2%); finalmente el exPST, convertido en el PFCRN, quien obtiene 9,769 votos (0.8%).
Vicente Fox, se postula para la presidencia de la república, y en agosto de 1999, solicita ausentarse del gobierno estatal, y lo suple el jalisciense Ramón Martin Huerta, quien quedaría como gobernador sustituto.
En la elección para gobernador del 2000, el PAN con Juan Carlos Romero Hicks –exrector de la UG-, obtiene la gubernatura con 1,004,603 votos; le sigue el PRI, otra vez con Juan Ignacio Torres Landa quien consigue 604,363 votos (34%); Miguel Alonso Raya, en alianza el PRD-PT-PCD (nuevo partido nacional)-PAS (exPDM), obtienen 119,245 votos (6.7%); y por primera vez aparece el Partido Verde Ecologista, logra 21,117 votos (1.2%); aparece Convergencia –actual Movimiento Ciudadano-, recibe 10,013 votos (0.6%); participa otro partido de nueva creación, Partido de la Sociedad Nacionalista, obtiene 3,068 votos (0.2%); y el PARM quien alcanza 9,183 votos (o.5%). Son diez partidos políticos; reciben 1,777,979 votos, de un total de 2,784,508 electores. Participa el 63.9% del Padrón electoral.
En la elección para gobernador del 2006, el PAN en unidad con Nueva Alianza –partido de nueva creación nacional- contiende con Juan Manuel Oliva Ramírez y gana con 1,166,820 votos (61.86%); le sigue el PRI con Miguel Ángel Chico, quien obtiene 494,448 votos en alianza con el PVEM (26.21%); EL PRD en coalición con el PT, con Ricardo García Oseguera, obtiene 204,143 votos (10.82%), 97 mil votos menos que en la elección presidencial de AMLO, obvio en Guanajuato; y participa otro partido nuevo, ASC, obtiene con Victoria Mendiola 20,871 votos (1.1%); Convergencia –MC- no postula candidato.
En este marco electoral, vale la pena destacar que el PAN postula a Felipe Calderón a la Presidencia de la Republica, y obtiene en Guanajuato 1,155,403 votos (58.9%); el PRI obtiene 368,789 votos, 126 mil votos menos que en la candidatura a gobernador; y el PRD-PT-CONVERGENCIA con Andrés Manuel López Obrador recibe 301,463 votos (15.3%), 97 mil votos más que en la candidatura a gobernador. El tiempo explicará esos datos.
En ese mismo contexto, el PAN gana 36 municipios; el PRI-PVEM gana 7; y la coalición PRD-PT, gana un municipio. Casi al final del mandato constitucional, Oliva Ramírez pide licencia para ausentarse del gobierno estatal, y Héctor López Santillana, expresidente municipal de León, queda al cargo como gobernador sustituto.
En el 2012 participa el PAN en coalición con el Partido Nueva Alianza, el candidato es Miguel Márquez, su votación es de 1,111,623 (55 mil votos menos que Juan Manuel Oliva), y gana con el 48.02% del total de la votación; en segundo lugar, queda el PRI-PVEM, con Juan Ignacio Torres Landa como candidato por 4ª ocasión, su votación es la más alta desde 1995, y obtiene 948,590 votos, casi el doble que Miguel Ángel Chico en la pasada elección (40.9%); el PRD obtiene con un Arnulfo Montes de la Vega, 119,244 votos (5.1%); el PT obtiene con Ernesto Prieto Ortega como candidato 28,786 votos (1.2%) -uno de los actuales candidatos de Morena a la gubernatura-, habría que recordar que en relación a la elección anterior –presidencial-, el PRD y PT, en apoyo a AMLO, habían obtenido del doble de votos (204,143 votos), perderían casi 150 mil votos; finalmente, Movimiento Ciudadano –antes Convergencia- recibe 21,453 votos (0.92%).
En la elección 2018, el PAN con Diego Sinhue en alianza con Movimiento Ciudadano y el PRD, gana la gubernatura con 1,040,949 votos, con 125 mil votos menos que Oliva Ramírez; en segundo lugar queda Ricardo Sheffield en la coalición Morena-PT, y PES, obtiene 507,903 votos, no es una suma importante si consideramos que solo hay una diferencia de 13,455 votos mas, en relación a la votación obtenida por Miguel Ángel Chico –su actual compañero de partido- cuando participó para gobernador en el 2006, doce años antes; en tercer lugar queda el PRI con Gerardo Sánchez, obtiene una votación de 266,916 votos, pierde el PRI 681,674 votos con relación a la elección anterior encabezada por Juan Ignacio Torres Landa; el cuarto lugar, fue para el PVEM con 143,739 votos (6.8%), que dimensionan su nivel de representación estatal, equivaldría a 3 mil votos por municipio; y finalmente, Nueva Alianza con 58, 815 votos.
El total de votos emitidos en esta elección, fue de 2,088,712 votos, incluyendo 68,211 nulos, de un padrón total de 4,396,360 electores; el porcentaje de participación fue de 52.52%. La elección del 2018, es un parteaguas histórico, gana la Presidencia de la Republica Andrés Manuel López Obrador, pero Guanajuato, no se cimbra. Si bien el crecimiento de electores de Morena parece reflejarse por un decrecimiento significativo del PAN, pero mayúsculo del PRI, desde luego, provocado e inducido como en la elección del 2006. Y un dato no menor, el Padrón electoral había crecido con 1.5 millones más de ciudadanos.
Si usted observa, pareciera solo un traslado de votos de una marca partidaria a otra. Es decir, el electorado votante no crece, y lo que se entrecruzan son las alianzas e intercambio de votos entre las tres fuerzas reales que sostienen el entramado electoral: PAN, PRI, y ahora Morena. Los otros partidos, como usted comprenderá, a partir de sus resultados, solo son parte de una decoración o escenografía electoral para no aburrir al respetable público, claro con un costo inaceptable.
Las lecturas de estas cifras van más allá de sumas y restas, reflejan las alianzas, las traiciones, las deslealtades, la simulación y ambición de algunos personajes, que a lo largo de los últimos 45 años han convertido la política en una mercancía que se vende al mejor postor. A esa distancia en tiempo, Guanajuato como los dioses antiguos tiene doble cara, por un lado, la marginación y el atraso; por otro lado, el desarrollo cromado y reluciente de una industria que deja saldos sociales y ambientales encubiertos, y, sobre todo, una dolorosa e infame marea de sangre y miedo que no cesa.
Revolcadero.
La elección del 2021, y las encuestas recientes, revelan nuevos resultados, nuevas alianzas, y nos permiten hacer una proyección de quienes pueden aspirar con fundamento a gobernar Guanajuato. Por ahora, lo que usted observa es un juego de cartas, en donde el que más blofea es quien no tiene león que lo pinte. Los números no les alcanzan, la definición del género les asusta, y claro, el sorteo y al azar pueden ser la sorpresa. Por ahora, asoman la cabeza, solo promotores de la lectura, Vasconcelos se retuerce en su tumba, y lo comprendo.